El nacimiento de la nueva oposición

La oposición está en una encrucijada, no encuentra qué ruta utilizar para enfrentar a un régimen con más poder. Esto sucede en un momento calamitoso para el país, cada día son más las muertes de personas por falta de medicamentos, las enfermedades endémicas han reaparecido cuando se creían erradicadas, los enfermos de diabetes e hipertensión viven una tragedia para conseguir sus medicinas, ni hablar de la crisis del efectivo, también el hambre y la violencia nos golpea inclementemente. El país se desangra y se derrumba y todavía no existe una orientación creíble de los líderes de la maltratada MUD. Pero no es hora de críticas y de lamentos, es necesario promover ideas para hacer de la oposición una coalición sólida y sobre todo que tenga credibilidad.

Es por ello, que creo que es necesario que los voceros principales de los partidos más representativos, quienes por cierto son los más rechazados por la sociedad, se alejen un poco de la exposición mediática, y den paso a figuras con mejor credibilidad. Quizás Eduardo Fernández pueda fungir como un interlocutor importante, Elías Pino Iturrieta, Alonso Moleiro, Cesar Miguel Rondón, Trino Márquez, Claudio Fermín, el padre Virtuoso y muchos otros que pueden fácilmente ser veedores y voceros en la oposición.

De igual manera se debe ampliar la coalición opositora no meramente en partidos políticos, también se debe ampliar en las características de sus miembros. Se deben involucrar a los gremios, a la sociedad civil, a las universidades, a miembros eclesiásticos, a periodistas renombrados, a estudiantes, es decir, a todos los sectores de la vida nacional.

Los resultados electorales dan no solo para exaltar el “te lo dije” desgraciadamente debo incluirme en la lista de las personas que advertimos este descalabro, fueron innumerables la cantidad de veces que discutí con amigos y familiares debido a mi posición de no participar en las elecciones de 15 de octubre, ya que siempre pensé en que era una trampa cazabobos. Lo importante no es quedarnos en el “te lo dije” también es necesario ser parte activa en la búsqueda de posibles alternativas y acciones para lograr rescatar la credibilidad perdida por la oposición.

Soy optimista al pensar que el chavismo no es mayoría, logró esos resultados electorales gracias a las herramientas conocidas por todos: el chantaje, la manipulación, el fraude, y las actitudes groseramente abusivas por parte del plan república y los lambiscones de los miembros de las comunas, los CLAP y del frente Francisco de Miranda que supuestamente trabajan en el CNE. Es por ello, que las personas quieren respuestas concretas y que se les hable con la verdad, desean y anhelan a factores de oposición creíbles, es una cuestión de confianza. Si los principales líderes dejan un poco la soberbia y sus apetencias personales y les dan el protagonismo a personas con el aval necesario para generar esa confianza, estoy seguro que esa apatía y desconfianza principalmente en la clase media desaparecerá.

Es necesario crear un frente de lucha contra la dictadura, se debe en primer lugar reconocer que estamos en dictadura, no se puede ser ambiguo. Aquí se está jugando el futuro de todos los venezolanos, la miseria y la pobreza no es algo espontáneo, esto es una estrategia castro comunista para controlar a la sociedad. Esa estrategia es típica de gobiernos Marxistas cuya intención es crear la necesidad para luego ellos con planes populistas satisfacer parcialmente esa necesidad de una forma mesiánica. De esta manera controlan a aquellas personas de bajos recursos y a aquellos ilusos que tienen esa afinidad y dependencia del estado.

Esa estrategia de esclavitud moderna es muy peligrosa, es por ello que se debe evitar la anti política, esa fue una de las razones por las cuales llegó el sátrapa de Chávez, ahora puede pasar lo mismo pero con la diferencia de que la intención es consolidar a este régimen macabro, corrupto y mafioso. Esa percepción de que la oposición es solamente la militancia partidista debe cambiar, es por ello que las decisiones las toman los líderes de esas toldas.

Nada más alejado de la realidad, la oposición somos todos aquellos ciudadanos que no estamos de acuerdo con la dictadura y que nos oponemos a su política populista, dictatorial y autocrática militemos o no en un partido político, y que por lo tanto nuestras opiniones deben ser escuchadas. Tiene que existir más interacción entre los líderes y la ciudadanía. Las personas no están ávidas de participar, por lo tanto ese trabajo de incentivación a que la gente participe en las tomas de decisiones debe realizarse. Pero para ello deben existir líderes que generen confianza y credibilidad.

Así mismo, el hecho de involucrar personas y gremios no es solamente un paso, la idea es que se le dé el protagonismo que ellos requieren, lógicamente será difícil que la sociedad les brinde confianza en poco tiempo. Pero es imperativo hacerlo ya, ningún partido puede luchar contra este régimen solo, es necesaria la confluencia de todos. La situación del país se seguirá agravando, Maduro y su combo están felices al observar las fracturas y como diría cualquier Marxista las contradicciones internas en la oposición.

Las diferencias internas de la oposición son difíciles de ocultar, pero gracias a Dios existe la posibilidad de enmendar cualquier discrepancia en corto tiempo. Eso si se cuenta con las personas que puedan intervenir en esa dirección. La comunidad internacional está de nuestro lado, solo espera coherencia y determinación en la oposición, no es atacando a Almagro que vamos a resolver nuestras diferencias. Acciones como las de María Corina respaldando a Almagro son de las cosas que debemos hacer, no insultando tal como lo hizo Ramos Allup es que vamos a seguir contando con el apoyo de personas con la investidura del secretario de la OEA. Estoy convencido que va renacer una oposición más sólida y confiable. Enhorabuena.