Draculidad

Un film de vampiros hastiados y amantes del rock: ‘Sólo los amantes sobreviven’ (‘Only lovers left alive’, 2013) de Jim Jarmusch.

Expresión propia de la llamada antipolítica, el fraudulento gobernador del estado Carabobo, Rafael Lacava, lo decidió como imagen corporativa.  La acuñación inicial de Drácula, deseada como una jocosa irreverencia,  en una versión de historieta, ha cobrado toda la significación de la leyenda que cuenta, por cierto,  con una profusa filmografía.

Las ideas y actuaciones del procónsul carabobeño, muy bien sintonizan con la maldición del socialismo. Desde la delictiva incursión en unas modestas elecciones universitarias hasta el sabotaje del itinerario que finalmente cumplieron los parlamentarios hacia la frontera occidental del país para diligenciar la ayuda humanitaria, contó con los aportes del díscolo Lacava que le lleva un puntaje notable a otros de sus colegas regionales, en la querencia de Maduro Moros.

Se dirá que nadie más sincero que ambos para apalear literalmente a quienes les predican la paz, a través de una insólita represión y censura, profundizado el hambre y la miseria. Verbalizado o adjetivado, esta práctica define el prototipo y la condición del liderazgo político que también  ha parido el siglo, capaz de utilizar a los presos comunes como fuerza de choque frente a la ciudadanía o extender el feriado carnestolendo para un particular o atípico Estado de Sitio.

Fortalecida por la sangre siempre ajena que corre por las calles, a la dictadura poco  le importa hincar sus colmillos en niños y ancianos que desesperan por un medicamento. De día, envía a sus huestes a la cacería abierta  de todo aquél que ose quejarse y de noche también para la selectiva captura de las presas que se le antoja de una alta peligrosidad.

A pesar de los pesares, los líderes de la Transilvania actual, los que ofician en los altares más obscuros del poder,  suelen dormir con una pasmosa tranquilidad, pues, suelen acostumbrarlo, sus seres queridos están allende los mares destinados a administrar las grandes fortunas acumuladas.  Síntesis de la (anti) ética de la draculidad y la draculización de la política, demolida Venezuela por largos veinte años, escarban y roñen entre los escombros  para que los herederos veneren un nombre por los siglos que – dicen – les falta por vivir.

Un film de vampiros hastiados y amantes del rock: ‘Sólo los amantes sobreviven’ (‘Only lovers left alive’, 2013) de Jim Jarmusch.

Un film de vampiros hastiados y amantes del rock: ‘Sólo los amantes sobreviven’ (‘Only lovers left alive’, 2013) de Jim Jarmusch.

 

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