Derecho a la salud y las personas LGBTI en Venezuela

¿Quienes integran la comunidad LGBTI?

La comunidad LGBTI la integran personas que se identifican como lesbianas, gays, bisexuales, trans e intersex, quienes buscan la aceptación y el respeto por parte del Estado y de la ciudadania.

¿La comunidad LGBTI tiene derecho a la salud?

Todas las personas deben poder ejercer el derecho a la salud. “La igualdad  exige que los Estados adopten medidas para reformular toda legislación, práctica o política discriminatoria” afirma la OMS en un informe del 2017.

En consecuencia, el Estado garantizaría a sus ciudadanos un sistema de salud integral que incluya a todas las personas por igual, promoviendo el buen trato hacia la comunidad LGBTI en los hospitales, clínicas o centros de salud en general. Siendo así, en Venezuela las mujeres Lesbianas al dirigirse a un ginecólogo irían con mucho entusiasmo sin ocultar lo que son, teniendo la confianza de que esa persona tendría un discurso y un servicio de inclusión. Qué mayor ejemplo que el caso de María: es una mujer lesbiana que tiene seguridad en sí misma y en el sistema de salud de su país, va cada mes al ginecólogo, siendo tratada con total normalidad, le dan orientación sobre métodos de protección adecuados para las mujeres lesbianas  y temas cotidianos de la salud.

Los hombres Gays podrían confiar en que tienen un sistema de salud que los respete y los oriente a tener una vida sexual sana, así cuando un hombre homosexual se dirija a algún centro de salud a hacerse exámenes de rutina, los doctores de manera profesional podrían indicar los métodos de prevención de enfermedades, como el VIH/SIDA haciendo énfasis en que dicha enfermedad la puede adquirir cualquier persona. Como es el caso de Manuel, quien me comentó: “Fui entusiasmado al médico que queda cerca de mi casa porque era mi primera cita médica como adolescente, había escuchado que él era muy amigable y te deja expresar libremente como eres, (comentaban mis amigos quienes ya habían ido a hacerse sus chequeos de rutina) ya en el consultorio, el doctor me atendió amablemente, me escuchó y orientó en temas de mi orientación sexual. Además aclaró que como todo hombre tengo que usar métodos de protección para la prevención de enfermedades como el VIH/SIDA que no solo las pueden adquirir las personas de la comunidad LGBTI sino toda persona que tenga relaciones sexuales sin ninguna protección.

Algo fundamental que debe garantizar el Estado a través de sus políticas públicas de inclusión es darle visibilidad y acompañamiento a las personas bisexuales, para que en los centros de salud sean atendidos con normalidad y que se sientan en total libertad de expresar lo que sienten y cómo se identifican. Así como Verónica, que me comento que es tratada por su ginecóloga, quien la orienta tanto en métodos de protección cuando tiene una relación con un hombre, como con una mujer.

Las personas trans deben contar con servicios públicos especializados para acompañar su proceso de reasignación de género, a través de la aprobación del protocolo gratuito, y la creación de Unidades de Servicios Especializada, además con el derecho a la identidad, en los centros de salud serán atendidas sin ningún impedimento. Como en el caso de Adrián: Él es un chico trans, que gracias a las políticas públicas de inclusión del Estado logró obtener su documento de identidad, las orientaciones médicas necesarias para acompañar su proceso de hormonización y apoyo económico para solventar lo costoso de este proceso, gracias a la ayuda del Estado hoy Adrián puede decir que legalmente es como él se identifica. Por consiguiente si la ley le garantiza a las personas intersex el derecho a que ellos decidan sobre su cuerpo, al nacer se les permitiría seguir con su crecimiento hasta que sean lo suficientemente maduras para decidir con qué género se sienten identificadas y qué tipo de tratamiento quieren seguir, si es que desean seguir alguno. Por ejemplo Rubén  quien es un chico intersex, cuando nació los médicos orientaron a sus padres (con el respaldo legal) a que antes de practicar una intervención quirúrgica en ese momento, debían esperar que el niño tuviese una madurez suficiente para decidir con qué genero se identifica y que tratamientos seguir. Efectivamente es así y hoy en día Rubén se identifica con el género masculino y vive una vida tranquila.

¿Cómo podemos tener en VENEZUELA un sistema de salud integral?

Teniendo el Estado políticas públicas de inclusión e integración, con metodologías educativas y participativas sobre la diversidad sexual que fomenten la inclusión, la igualdad y el respeto a la diferencia. Eso se logra a través de la información y concientización de  las personas que serán futuras maestras, doctores, psicólogos o enfermeras quienes llevarán a la práctica esta metodología; fomentando la inclusión en colegios y centros de salud, a través campañas de prevención y concientización sobre enfermedades como el VIH/SIDA y evitar la proliferación de la misma, con el fácil acceso a condones femeninos y masculinos, y las personas que hayan adquirido esta enfermedad tengan instituciones que les garanticen el  acceso a los medicamentos antirretrovirales, que si alguna madre seropositivo tiene un hijo(a), que las farmacias públicas tengan fórmulas lácteas para las niñas y niños con VIH, algo importante que el gobierno debe informar y promover: es que dicha enfermedad la puede adquirir cualquier persona sin importar su orientación sexual, así las personas de la comunidad LGBTI tendrán mayor aceptación en la sociedad.

Partiendo de las políticas públicas de inclusión por parte del Estado, en los bancos de sangre adscritos al sistema público de salud venezolano, se les debe permitir donar sangre a todas las personas sin que su orientación sexual sea un impedimento. Para la comunidad LGBTI sería un logro poder celebrar cada 14 de Junio siendo el día Mundial del Donante de Sangre, teniendo un sistema de salud que permita salvar vidas a través de la donación de sangre. Así mismo el Estado debe tener un discurso de inclusión, de tolerancia y de respeto, garantizando el derecho a la salud de todas las personas sin distinción alguna por raza, orientación sexual o ideología política.

Contribuyendo así a grandes avances para lograr los Objetivos de Desarrollo Sostenible vinculados al derecho a la salud.