CARTA ABIERTA AL GIGANTE

Por Ricardo Del Bufalo

 

Gigante, a tres meses de tu partida

 

Querido comandante supremo y eterno:

 

Noventa días después de que alzaste vuelo, te escribo esta carta desde tu tierra, la patria independiente que nos legaste a los revolucionarios de América Latina, para comentarte algunas cosas que me tienen preocupado.

 

Tengo muchísimas cosas que decirte, pues en un país tan noticioso como el nuestro, tres meses parecen años. Verás, las cosas han estado muy mal desde que partiste al reino de los cielos. La derecha nos ha declarado la guerra económica y política y nosotros estamos aguantando ¡porque tú vives y la lucha sigue!

 

Desde que devaluaste la primera vez, ¿te acuerdas?, las cosas han ido subiendo de precio. El gobierno tuvo que ajustar en 20% el precio de algunos alimentos. También ajustó el pasaje en 30%. Es raro, comandante, que todos los ajustes sean para arriba. Por su parte, la derecha especuladora ha aumentado todo. Hasta la inflación la aumenta mensualmente. Hay escasez de papel tualé, harina, mantequilla y pollo. Yo creo que es la burguesía la que empezó a acaparar todo justo después de que falleciste, porque sabía que solo tú los podías joder. Pero aparte de eso, la verdad es que el sueldo está muy bajito.

 

No sé si te acuerdas que pocas horas antes de las 4:25 de la tarde, hora horrorosa en la que falleciste, el Vicepresidente Maduro dijo que la enfermedad que tenías había sido inoculada por los enemigos de la patria. Dijo que se harían investigaciones al respecto, pero no lo ha vuelto a mencionar. Quiero que se haga justicia, comandante, y que se sepa la verdad sobre ese cáncer tan raro que te quitó la vida, que ni tu círculo más cercano supo cuál era. No puede haber tanta impunidad.

 

Poco tiempo después de tu muerte, la Presidenta del CNE anunció la fecha de las elecciones presidenciales para el 14 de abril, ¡grandiosa fecha! Justo un día después de aquel glorioso 13 de abril de 2002, cuando el pueblo te rescató. Por esos días vendieron Globovisión, ¡claro, porque ya no tenían de quién hablar mal! Quedaron en hacer el traspaso de propiedad el 15 de abril, para hacerle el último favor a Capriles de transmitirle la campaña. Es que son unos descarados. Menos mal que los canales de la patria pudieron hacerle la contra al ventajismo opositor.

 

Luego empezó la campaña. Maduro hablaba bien, pero le faltaba como algo. Faltabas tú. ¡Pero cómo no, si tú eres el Gigante, el Cristo redentor de los pobres, el Libertador del siglo XXI, el comandante supremo y eterno de esta revolución! Maduro dijo que te le apareciste en forma de pajarito. Eso no me gustó.¿Es verdad? ¿Ese eras tú?

 

Pues el camarada Maduro ganó las elecciones, supongo que eso ya te lo habrán dicho. Ganó por poquito, pero ganó. Como era de esperarse, la burguesía no reconoció los resultados e intentó dar un golpe de Estado. Enseguida, los fascistas salieron a la calle a crear violencia. Quemaron varios CDI y mataron a once compatriotas, comandante, ¡once! La ministra Varela, el canciller Jaua, el compañero Diosdado y el Presidente Maduro dijeron que Capriles era el asesino. Yo recuerdo que usted, siempre autocrítico, decía «eficiencia o nada», pero nada que meten preso a Capriles. Hay que derrotar la burocracia, la delincuencia está desatada.

 

Sin embargo, no todo es malo. Por esos días, las autoridades de seguridad capturaron a un espía de la CIA que intentó desestabilizar al país ayudando a los fascistas. Pero la semana pasada lo soltaron porque las investigaciones mostraron que el tipo en realidad era un documentalista. Menos mal que estaban pilas.

 

Esa misma semana, el viernes 19 de abril, Maduro se juramentó en la Asamblea Nacional ¡y ha entrado un hombre a quitarle el micrófono! En ese momento sentí mucho miedo, comandante. Pudieron haberle dado un tiro al camarada Nicolás. Hay que ser realistas, la seguridad falló. Pero solamente ese día. Los demás días sí estaban preparados para el golpe de Estado.

 

Como la oposición no reconocía al camarada Nicolás, el Presidente de la Asamblea Nacional no los reconoció a ellos. ¡Bien bueno! Les dijo que no les daría derecho de palabra hasta que lo reconocieran. Días después, la oposición montó una olla en la que los diputados de la patria cayeron por inocentes. Los fascistas fueron con pancartas provocadoras y tocaron corneticas que los puso tan histéricos que les dio por dar golpes. No podemos malgastar fuerzas. Necesitamos esos nudillos para otras cosas.

 

Más adelante ocurrió un escándalo, provocado por el traidor de Ismael García. Mostró una grabación de audio, falsa por supuesto, con una voz igualita a la de Mario Silva, acusando de corrupción a Maduro, Cilia, Arreaza, Diosdado y Molero. Mario dijo de una vez que todo era un montaje y que el Mossad estaba detrás de todo esto. Pero todavía no han capturado al tal Mossad. Casualmente, esa misma noche, Mario dijo por La Hojilla que tenía problemas de salud y que se tenía que ir por un tiempo a curarse. Casualmente, la semana siguiente sacaron a La Hojilla del aire. Eso fue muy raro. Yo lo que creo es que se quedó sin rating. Además, el canal no puede con tantos gastos, porque el presupuesto asignado a VTV este año es casi tan miserable como el de las universidades, sin contar lo que se chupan los vampiros…

 

Después del escándalo, la derecha mostró fotos de un tipo igualito a Mario en aviones, en un lugar donde hay muchos televisores, con muchos guardaespaldas, comiendo langostas. Salieron supuestos correos electrónicos entre Mario y un hacker. Lo extraño, comandante, es que Mario está yendo a la Fiscalía a declarar. No sé por qué lo hace, si todo es un montaje. Creo que el Mossad tiene contactos en la Fiscalía.

 

Te tengo una mala noticia, comandante. Lamento decirte  que ya no somos amigos de Colombia. Santos recibió al fascista de Capriles y luego Diosdado, Jaua y Maduro descubrieron que estaban conspirando desde Bogotá. Espero que sea mentira y que nos arreglemos pronto, porque sino no vamos a tener qué comer.

 

Antes de despedirme, comandante eterno, quiero comentarte una última preocupación. Primero, una buena noticia: las elecciones municipales serán el 8 de diciembre, el mismo día de tu última proclama. ¡Siempre el CNE tan acertado con las fechas! (Aquí entre nos. ¿Lo hacen a propósito? Dime la verdad.) El hecho es que todos en el partido queremos hacer primarias, pero parece que no se van a hacer. Eso está mal, comandante. Hay gente en el partido que hace chanchullo y consigue que lo nombren a dedo. La revolución no puede seguir con esos vicios. ¡Hay que sacar a los enchuf… infiltrados! ¡Hay que ir contra ellos y lo voy a hacer con mi voto!

 

Con esto me despido, querido Cristo redentor. Espero escribirle en los próximos meses con mejores noticias. Me hace mucha falta, porque con usted las cosas estaban mejor, aunque nunca lo parecía.

 

Un saludo revolucionario, cristiano y bolivariano.

Un besito.

 

@RDelBufalo