Encauzar la protesta
Por Ricardo Del Bufalo
@RDelBufalo
He visto que las protestas estudiantiles en Caracas están disgregadas. No se organizan los dirigentes, no saben para dónde marchar ni está claro el motivo de la protesta.
He escuchado consignas desubicadas. “Y va a caer, y va a caer, este gobierno va a caer”. Eso solamente dice la fantasía colectiva, no el objetivo. “¿Quiénes somos? Estudiantes. ¿Qué queremos? Libertad”. ¿No protestábamos por seguridad en las universidades, no queríamos libertad para los estudiantes detenidos? Ni hablar de #12FVnzlaEnLaCalleNicolásPaElCoñoTeVas.
En lugar de las consignas, deberíamos utilizar la palabra. Que nuestra protesta sea conversar con los militares. Sentarnos en el asfalto con ellos. Abordarlos por separado. —Pana, ¿a ti te parece justo hacer cola por horas para comprar papel tualé?, ¿te parece digno que no haya suficiente harina?, ¿te han matado a un familiar?, ¿te alcanza la plata? Tú sufres lo mismo que yo. Yo estoy aquí protestando por mi calidad de vida.
Escucha si te responde. Dale la mano.
(Si alguno te saca una pistola, es muy probable que no quiera hablar contigo. Con ese, fuchi.)
La lucha es contra el gobierno, no contra la Guardia Nacional. No gastes tus energías en tirar piedras contra tanquetas. Encauza tu descontento en un discurso. Invita al chavista a unirse a esta causa. Búscalo en la cola del supermercado y del cajero automático. Háblale. Escúchalo. Ayúdalo a entender que la guerra económica no existe, que la escasez es consecuencia de los controles gubernamentales sobre la propiedad privada. Ayúdalo a entender que la delincuencia es producto de la impunidad, del sistema judicial que hace caso a la lealtad y no a la eficiencia.
Lo nuestro no es vencer, sino convencer.
