REPÚBLICA DE LA INDOLENCIA

Por Eduardo Méndez Sánchez

 

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La capacidad de asombro de los venezolanos es sometida a pruebas cada vez más exigentes. Twitter, como es costumbre, fue una herramienta aprovechada para medir el efecto causado en los usuarios ante las revelaciones que hizo Mario Silva a Aramis Palacios durante la grabación que presentaron los diputados de la Unidad.

 

Los hashtags promovidos por tuiteros opositores y oficialistas escalaron rápidamente la cuesta de los trending topics en Venezuela que compilaban, por un lado, la indignación de quienes vemos como, entre muy pocos, desde el poder, han convertido al país en una jungla de violencia, corrupción y atraso. Y, por otro lado, vimos a quienes, tras escuchar cómo se consumaba la traición a la Patria, preferían ser solidarios con Silva, espía venezolano al servicio del G2 cubano.

 

Más allá de ambas tendencias y fuera del posicionamiento tuitero, estaban aquellos a quienes las confesiones hechas por Silva les parecían “una raya más para un tigre”. Incluso, algunos manifestaron su decepción y culparon a los líderes de la oposición de haber generado “tanto alboroto  y expectativa por nada”, como si se tratase del capítulo final de una telenovela en el que la niña pobre no se queda con el niño rico.

 

Lo que se dijo en esa grabación es muy grave. Los diputados de la Unidad develaron un documento que en cualquier país del mundo, con instituciones democráticas, habría significado el fin inmediato de un Gobierno por los delitos que podrían haberse cometido, de acuerdo con juristas expertos en materia penal consultados por medios impresos.

 

El despacho de Luisa Ortega Díaz anunció el jueves a través de su cuenta de Twitter (@lortegadiaz) que su despacho investigará la supuesta grabación. Mientras esperamos la sorpresa que podría dar el Ministerio Público si imputa a los personajes del PSUV citados por Silva, seguimos clamando justicia y libertad para los presos políticos, y el fin de las persecuciones contra quienes piensan distinto al régimen.

 

noveonooigoPero la contundencia con que se acosa a los ciudadanos que critican, valiéndose de todo el aparato estatal, no se evidencia en el caso de Silva.

 

Muestra de ello es la posición de la Comisión de Política Interior de la Asamblea Nacional, presidida por el diputado Pedro Carreño, donde ven lo dicho en la grabación como un “más de lo mismo”, un asunto en el que es innecesario ahondar.  El ente parlamentario se escondió detrás de esa misma posición tomada por algunos venezolanos que se identifican como adversarios del socialismo autocrático que gobierna.

 

El “más de lo mismo” es lo que tiene al país haciendo horas de cola para comprar alimentos de primera necesidad y productos de aseo personal. La costumbre es lo que convierte a las víctimas de la inseguridad en un número más y lo que hace que muchos salgan sonriendo, con una alegría triste, cuando salen del supermercado con un bulto de papel higiénico.

 

En el momento en que no tengamos la capacidad de sorprendernos y generar conciencia en quienes vemos todos los días, en nuestro entorno, habremos dejado a Venezuela en manos de quienes tanto criticamos los que soñamos con un futuro mejor. Cuando la indolencia y la indiferencia se conviertan en nuestras filosofías de vida, sabremos con certeza que habremos perdido el país. 

 

@EduardoMS7

 

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