El Asesor

Por Gabriel Reyes

@greyesg

 

 

 

No creo que ni Joe Napolitan ni DIck Morris lo hubieran hecho mejor. Un precandidato que necesitó retirarse de un proceso de primarias por no contar con un apoyo significativo en los estudios de opinión, hoy en día no solo es el principal representante de la oposición venezolana sino la referencia global de la resistencia en Venezuela.

 

Eso solo podía ser posible contando con un asesor muy sagaz, que lo reposicionó desde el lugar del dirigente incómodo que cambiaba de partido político por querer ser el líder hasta que formó el suyo propio hasta el prisionero de conciencia del régimen, encarcelado por temor a su verbo y a su capacidad de aglutinar mayorías a su alrededor.

 

Hasta los más perversos practicantes de las teorías de conspiración quienes advierten que se encuentra en prisión por obra de un trato entre rojos y la nueva corriente denominada por algunos del «huevo frito», saben que cada día el prisionero es más fuerte y su imagen se ha convertido en ícono de la valentía, la dignidad y el sacrificio.

 

¿Hasta cuándo el asesor del prisionero lo dejará en las sombras emulando cada día que pasa a Nelson Mandela y atrayendo comentarios y adhesiones de los líderes del mundo civilizado?

 

Tal vez, el asesor del asesor, ese que lo llama «asesino» en las cámaras cree que se la está comiendo y que el pueblo disfruta de sus insultos, improperios indebidos a quien no puede defenderse, pero lo cierto es que cada mes, cada empresa que mide clima político lo asoma como el encargado de reconstruir un país en ruinas por encima inclusive de su propio partido.

 

El asesor lo ha hecho tan bien que hasta sus detractores más acérrimos ven con ojeriza la sentencia absurda que lo mantiene confinado. Realmente condenarlo de esa forma lo impulsó varios puntos más en ese sitio anhelado por muchos y que solamente con la ayuda de un experto era posible alcanzar. Ahora quieren pensar en darle casa por cárcel como para enfriarlo y bajarle dos al martirio que lo posiciona a la vanguardia de los herederos de este desastre, pero el miedo es libre y el asesor del asesor recomienda que lo tengan bien guardado porque tal vez no confía en quienes lo cuiden, tal vez porque sabe que también están con él.

 

Parece imposible, pero el asesor ha hecho que su contrincante en la contienda anterior sea casi olvidado, ha puesto a marchar a sus detractores en las calles de Venezuela pidiendo su liberación, tal vez porque ellos si saben las consecuencias del trabajo eficiente de un asesor comprometido.

 

Faltan algunas lunas para que el prisionero vea el sol al aire libre y junto a su familia, pero gracias al asesor, todos los venezolanos entendemos que un hombre sacrificó su libertad y su familia para demostrarle al mundo que la democracia no consiste solo en elecciones.

 

Amanecerá y veremos…