“Maldito el soldado que dispare contra su pueblo”
Los últimos días han sido tensos para el país, las protestas se han hecho sentir una vez más sobre todo en la ciudad capital de nación. Hay cientos de problemas que empañan el futuro y dificultan el presente de la gran mayoría de la población, la falta de alimentos, medicinas y seguridad además de una inflación que nos hunde en miseria a millones de venezolanos hace que sean más las personas que no están de acuerdo con el gobierno actual. Hay una pequeña esperanza que recae en la desobediencia civil pero junta a ella llega una realidad mucho peor: la represión por parte de la policía nacional bolivariana y la guardia nacional es cada vez más fuerte.
El caso concreto
El pasado martes 4 de abril un joven de 22 años se dirigía a un ensayo con la Fundación Orquesta Sinfónica Juvenil de Chacao pues es cornista de la misma. Por mala suerte en el camino había que atravesar una marcha de la oposición. El músico se encontró en medio de una situación de represión contra los manifestantes, para su mala suerte resulto arrestado en el hecho.
Con el instrumento en las manos y corriendo sin saber que hacer se le puede notar en fotos y videos que circularon durante toda la tarde del martes por las redes sociales, el Sistema Nacional de Orquestas utilizó medios como Twitter e Instagram para ejercer presión y hacer ruido con el fin liberar a su integrante arrestado, junto a ellos se unieron varios periodistas, artistas y otras figuras públicas que no titubearon para exigir la liberación del joven.
Cabe resaltar que el Sistema Nacional de Orquestas no suelen involucrarse en la política, tanto el Maestro Abreu y Gustavo Dudamel han sido duramente criticados por la opinión pública por mantener silencio sobre la situación del país
Finalmente en horas de la madrugada del miércoles fue dejado en libertad. Un concierto que estaba pautado para el día 5 de abril fue cancelado en señal de protesta por el acto injusto e incluso Tarek William Saab, Defensor del Pueblo, se pronunció sobre el hecho solicitando un castigo para los responsables de encarcelar a Frederick Pinto. Es cuestión de lógica, ¿quién sale a protestar con un instrumento musical?
¿Resguardar al pueblo?
Casos como las del músico Frederick Pinto les aseguro que han ocurrido antes pero ¿cómo enterarse?, ¿cuántos inocentes les habrá tocado la misma suerte sin tener a quien acudir? La GNB y la PNB han demostrado en miles de ocasiones que cuando a represión se refiere no hay nadie que los detenga, desde usar la fuerza bruta hasta arresto “al primero que agarren”.
Son cientos los detenidos que desde las “guarimbas” del 2014 han tenido que pasar por las manos de quienes abusan del poder, eso sin contar aquellos que arremeten contra manisfestantes usando fuerza bruta o armas letales, como en el incidente con el joven Jairo Ortiz quien a los 19 años murió al sufrir impactos de bala. Cuando la sangre corre muchos son los que quieren satanizar los hechos de la “derecha fascista terrorista”, la tergiversación de la información se puede notar a simple vista.
Algo que parece curioso es que nuestra constitución dicta en su artículo 68: “Los ciudadanos y ciudadanas tienen derecho a manifestar, pacíficamente y sin armas, sin otros requisitos que los que establezca la ley. Se prohíbe el uso de armas de fuego y sustancias tóxicas en el control de manifestaciones pacíficas. La ley regulará la actuación de los cuerpos policiales y de seguridad en el control del orden público.”
Además los Derechos Humanos establecen que las manifestaciones pacíficas son un derecho y que “los Estados no deben interferir en las manifestaciones pacíficas y también deben proteger a los manifestantes en el ejercicio de sus derechos, en particular cuando las personas que manifiestan defienden puntos de vista impopulares o controvertidos o pertenecen a minorías u otros grupos que están expuestos a un riesgo mayor de victimización, ataques u otras formas de intolerancia. La presencia de observadores de los derechos humanos en las manifestaciones puede disuadir la violación de los derechos humanos. La labor de los periodistas también es importante para facilitar información independiente sobre las manifestaciones.”
¿Cuántos periodistas no salieron también heridos o detenidos por hacer su trabajo? Elyangélica González, periodista de Radio Caracol, fue agredida por unos 9 funcionarios de la Guardia Nacional el pasado 31 de marzo a las afueras del Tribunal Supremo de Justicia, hecho que fue registrado en un video que se viralizó por las redes sociales.
Las imágenes y videos que podemos ver en las redes sociales dicen completamente lo contrario a lo que establece la ley y a lo que dictan los Derechos Humanos, nuestra pregunta radica ahora en ¿quién regula estos actos?, ¿quién vela por la seguridad de los ciudadanos?, y también para nadie es un secreto que por parte de la oposición habrá una que otra oveja descarrilada pero… ¿Si es una manifestación pacífica por qué cerrar el acceso?, como esperan mantener el orden si reprimen e impiden proceder con los objetivos de las manifestaciones, muchas veces no pasa mucho tiempo para empezar a ver el humo de las bombas lacrimógenas, en los últimos días la mediación no ha sido una opción.
Se supone que a quienes deben resguardar las vidas de los ciudadanos se les indica que no deben usar la fuerza a menos que sea totalmente necesario y que las armas letales son exclusivas para asuntos de vida o muerte, en teoría por supuesto.
A pesar de las tanquetas, perdigones, murallas, armas, ballenas y bombas lacrimógenas la oposición se ha mantenido firme, exigiendo el derecho que les está siendo arrebatado: ¡Poder expresar una opinión por medio de la protesta pacífica! La situación que vive el país, la presión internacional, la situación con la Asamblea Nacional, se ha creado la bomba perfecta para encender los ánimos de la gente, la pregunta ahora es… ¿Qué tanto tiempo se prolongarán las protestas?, ¿valdrá la pena tanto esfuerzo? Sólo el tiempo dirá lo que ocurrirá en nuestro país.
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