Contra el Golpe a la Asamblea Nacional

El pasado 5 de Enero el régimen militar tomó por asalto el Palacio Federal y sin quórum, sin votos y sin medios de comunicación presentes en el hemiciclo impidieron la entrada a la mayoría de los diputados. Se llevó a cabo un golpe al parlamento para intentar impedir la reelección de Juan Guaido como presidente de la Asamblea y presidente encargado. Sin embargo, sin miedo, ni dudas, nuestros parlamentarios sesionaron en la sede de El Nacional, conforme al Reglamento de Interior y Debate, para finalmente elegir la directiva 2020 con 100 votos nominales. Juan Guaido es reelecto.

No hay dos Asambleas, solo una, la electa por el voto de la mayoría de los diputados. Sin embargo, el régimen militar a puesto en marcha la fábrica de infamias en la que convirtieron los medios públicos para engañar a la población. Primera mentira: los autoproclamados “son de oposición”, no lo son, en el momento en que recibieron dinero manchado de sangre dejaron de ser miembros de la alternativa democrática. A otro perro con ese hueso. Segunda mentira: “los diputados no entraron porque no quisieron”, en las redes circulan todos los videos que dan cuenta de cómo las FAN, en deshonra absoluta de su uniforme y reviviendo el fantasma del monagazo del siglo XIX, impidieron violentamente a los diputados entrar al Palacio Federal.

Ahora bien, ¿qué debemos hacer los demócratas? Cerrar filas junto a Juan Guaidó. Elías Pino Iturrieta no exagera al decir que él personifica lo que queda de República, es así. La Asamblea Nacional y Juan Guaido son el último vestigio de legitimidad democrática que queda en Venezuela tras la destrucción del Estado de Derecho ejecutada por la Usurpación. No hay lugar para la duda, para la vacilación, para el dibujo libre, o se está con la causa democrática o se es cómplice de la dictadura por acción u omisión.

Aquí en Carabobo los diputados de nuestra región han hecho su parte, heroicamente por demás, Rommy Flores y Antonio Román merecen aplauso de pie de todos sus compañeros adecos (entre los cuales orgullosamente me incluyo), pero sería egoísta si no reconozco a todos los aguerridos miembros del Bloque Parlamentario Regional que se desmarcaron de los alacranes y enfrentaron con dignidad la brutalidad autoritaria y corrupta.

Ahora también la sociedad civil debe alzar la voz, sería recomendable que todos los medios de comunicación emitan una declaración conjunta rechazando la toma violenta del Palacio Federal y la censura, debemos aplaudir y emular la declaración del Colegio de Abogados de Caracas en la que denuncia el golpe parlamentario. Deberían asimismo hacerlos las universidades, específicamente las Facultades de Ciencias Jurídicas y Políticas, para que quede claro que los politólogos, abogados y docentes universitarios no nos encerramos en el claustro, que somos ciudadanos, pensamos y actuamos. Lo reitero, el silencio nos haría asquerosamente cómplices.

Hoy, el reconocimiento internacional a Juan Guaidó y a la Asamblea Nacional es mayor. Se suma Bolivia y Argentina a todo el hemisferio que pide una solución pacífica, constitucional y electoral a la crisis. Nadie dijo, ni dice, ni dirá que es fácil, el miedo puede sentirse en el ambiente, pero es de demócratas sobreponerse al temor y luchar. #SeguiremosInformando