Combatir el hambre que desmoraliza

Lo cierto es que existe hambre en Venezuela, o, empleando un término tan justamente dramático, hay una hambruna irrefutable. El costo mensual de la cesta básica luce inalcanzable para las grandes mayorías, siendo inconcebible el nivel de ingreso real de los venezolanos.

Padecemos las consecuencias del llamado socialismo del siglo XXI que pretende escudarse en las justificadísimas sanciones internacionales de las que ha sido objeto,  Arruinó a la otrora potencia petrolera para asombro de propios y extraños, mediante un deliberado y adicional esfuerzo de sojuzgamiento que parece no tener límites, ni escrúpulos al cebarse morbosamente la población infantil. 

Los expertos en la materia calibran muy bien la situación con cifras irrefutables, revertido el progreso experimentado por el país en las últimas décadas del siglo pasado.

La dudosa calidad de las agigantadas importaciones, bajo un escaso o ningún control, incluso, sanitario al entrar al país, junto a los efectos perniciosos de la Ley de Tierras de una gran discrecionalidad, completa el cuadro de nuestras desesperaciones.

Nos dolió mucho saber de la precarísima situación en la que se encuentra el reconocido y octogenario antropólogo venezolano Esteban Emilio Monsonyi, a quien – por cierto – esa ignara izquierda marxista en el poder homenajeó y manipuló tanto en el pasado, o la de otro insigne académico como Herbert Koeneke al que se le agrega el sufrimiento de una enfermedad.

Hombres de un intenso, continuo y dedicado trabajo, ahora, huérfanos de toda protección social, como le ocurre a todo aquél que tuvo y tiene un pizarrón como su mejor y limpia credencial.

Necesario de combatirla, la hambruna desmoraliza a propios y extraños,  tanto como no llenar un carro de supermercado en nuestras compras: entre 800 y mil dólares es posible llenar una unidad de acuerdo a una joven cajera a la que le consultamos.

Siendo tan mínimo nuestro carro,  hay desbordarlo de coraje para mantenernos en pie de lucha a la espera del día en el que podamos comer completo y sano, al superar el presente régimen.

Últimas entradas de Luis Barragan (ver todo)
(Visited 46 times, 1 visits today)

Guayoyo en Letras