El fascismo emponzoñado en el lenguaje
Otra no menos importante preocupación, existe la natural tendencia a la saturación o confusión, pérdida o falsificación de las evidencias históricas. Incontables los eventos públicos que marcan el itinerario de la consabida crisis venezolana, sobran los testimonios personales, documentales, fotográficos o videográficos, susceptibles también de adulteraciones.
Sobre todo por lo que respecta a los medios digitales, es necesario canalizar y orbitar esas evidencias, aunque seguramente tardarán en aparecer aquellas más comprometedoras de la suerte personal. Al igual que habrá que esperar por las adecuadas interpretaciones, maceradas por el tiempo, que los especialistas aporten – ojalá – lo más objetivamente posible.
Ha circulado el audio que compromete severamente a la Guardia Nacional y a los grupos paramilitares en el asedio, asalto y secuestro del parlamento del pasado 5 de julio ( https://www.youtube.com/embed/_wFOxvPekNs ). La comunicación radial, prueba la coordinación y realización de las tareas que presuntamente involucran a la unidad militar enquistada en la sede legislativa, prometiéndola como toda una pieza de antología que, además de las responsabilidades penales que implica, contribuye a perfilar un poco más la propuesta totalitaria en curso.
Además del agavillamiento delictivo, por lo pronto, resaltan dos aspectos nada secundarios. Por una parte, la intención, voluntad y disposición fanática de asesinar, si fuere el caso, a los diputados, empleados y demás personas que ocupábamos el Capitolio Federal; y, por otra, la extrema procacidad del lenguaje.
No hay siquiera el asomo de algún elemento que nos permita inferir la más elemental convicción ideológica, sino una ceguera radical que se recrea, por momentos, en la auto-victimización. Demostrando la terrible acuñación de los victimarios, los desclasados de todas las clases, el populacho del que hablaba Hannh Arendt, tienen por característica el idioma del fascismo tenaz, emponzoñado en el alma, que avisa de la gigantesca y también dramática tarea de reconstrucción ética que deberá encarar la transición democrática.
- Música de supervivencia - 22 noviembre, 2024
- La ruta política - 15 noviembre, 2024
- El subconsciente de un robot - 30 octubre, 2024