SOBRE LA PROPAGANDA DE VOLUNTAD POPULAR. POR LAURA SOLÓRZANO

Por Laura Solórzano

 

La semana pasada nos tocó una de las tantas polémicas que se vive en un país donde todos pretenden saber de todas las materias, sobretodo cuando estamos en una campaña electoral. Desde noviembre del año pasado, cuando se hizo el debate de los candidatos presidenciales a las primarias de la oposición –qué nombre tan largo-., ellos dejaron claras sus posturas: Arria quería juzgar a Chávez, Capriles creía en la educación, López en la seguridad y Machado en varios temas.

 

Unos meses después López declina y se une a la campaña de Capriles fusionando su slogan y su propuesta con la del candidato ganador de las primeras, así nace –creo yo- “la seguridad es el camino”. Obviamente debe haber estudios de opinión detrás de esa elección. Hace una semana, Voluntad Popular se atrevió a hacer lo único que ningún partido o movimiento se ha atrevido a hacer “sacar una propaganda que el gobierno mandara a quitar”. Supongo que esa fue la acertada estrategia.

 

La propaganda muestra a un estudiante de la UNEFA llegando a casa de su mamá feliz porque presentó su último examen y está listo para graduarse. La mamá y él son personas de pocos recursos, viven en un barrio. De fondo se escucha lo que parece ser la canción de campaña del candidato Chávez. La mamá prepara café, el muchacho sale, se escuchan unos disparos, el muchacho muere. Se escribe fácil, pero se vive difícil.

 

Ese día escuché opiniones como: “Es muy fuerte, la vi con mi sobrina, ¿Cómo se lo explico?”, “Usan a los muertos para hacer campaña”, “deberían quitarla, ¿Sabes? No es tan grave creo que exageran”, “es un mensaje vacío, no tiene un llamado a la acción”. Para mí estaba muy bien planteada y el mensaje era clave: Sal a votar porque hay un camino, es la seguridad. No hace falta tener un PhD para entender que el número de muertos semanalmente aumenta. No basta ser perfecto analista político para entender que la realidad de los muertos no es “ajuste de cuentas” sino víctimas inocentes del barrio.

 

Falta un mes para las elecciones y todavía escucho gente diciéndome “no sé por quién voy a votar”, yo los observo intentando descifrar cuál es la parte esta película que aún no conocen y no logro encontrarla. Sin embargo, les pregunto “¿Te sientes tranquilo en la calle, o sea, tipo que no te van a matar en cualquier momento?” y la mayoría me responde: Chama no, la verdad es que no; “ahí está tu respuesta pana, la seguridad es el camino y sí hay un camino”.