SIN FACTURA NO HAY RECLAMO

Por Andrés Abreu

 

Cada vez queda.menos tiempo para las elecciones presidenciales en nuestro país, el tan esperado 7 de octubre ya está a la vuelta de la esquina. Por eso considero que es el momento oportuno para hacer un llamado a esas personas; muchas de ellas jóvenes a que voten, no a que vayan y escojan uno u otro candidato porque cada quien es libre de seguir la ideología que desee y de votar por quien mejor lo represente. El punto es hacer un llamado a ejercer un derecho, el del sufragio.

 

¿Aún luego de tener elecciones de manera tan seguida existen personas que no votan o que no conocen la importancia de una elección presidencial como esta? Lamentablemente la respuesta a esa pregunta es un ‘si’ rotundo. Muchas de estas personas son jóvenes que nunca se han tomado el tiempo y la molestia de prestar un poco de atención al acontecer político del país en el cual viven y por eso simplemente no votan. El problema radica en que no se trata de escoger entre un refresco y un jugo natural, en los procesos electorales se juega el destino de todo un país, particularmente en las de este año.

 

Lo peor de las personas que prefieren la abstención, son las razones por las cuales no van a votar. Ya parece costumbre escuchar cosas como «Yo no voy a hacer 3 horas de cola», «Mi voto no va a hacer la diferencia», «Yo mejor me voy a la playa ese fin de semana» y bueno, me quedaría corto con la gran cantidad de excusas que en cada proceso electoral se reciclan una y otra vez. Es importante decir algo: Chamo/a, la playa no se va a ir a ningún lado, puedes ir cuando no haya mucha cola, no vas a estar todo el día votando así que el DVD que compraste de la película que aún no ha salido al cine puede esperar un poco. En cambio, tu país no puede esperar, luego puede ser muy tarde para arrepentimientos.

 

Algo mucho más grave, pero sin embargo posible, es que a estas alturas del partido todavía existan personas que no saben lo que propone cada candidato. Esta problemática se resuelve con saber leer y con acceso a internet. ¡Googlealo y listo! Si puedes hacerlo para saber si se escribe hay, ay o ahí, puedes hacerlo para leer las propuestas e ideales de los candidatos al máximo cargo nacional; no cuesta nada.

 

Si luego de esto aún piensas que el domingo 7 de octubre es tan solo un día más, es hora de la última instancia: Si no votas, no te quejes. Es así, en el momento en el cual escoges seguir durmiendo en lugar de salir a votar pierdes todo permiso para emitir opiniones negativas o quejas en contra del candidato electo o de su gestión. Míralo de esta forma, el voto es como una factura y como en las tiendas «sin factura no hay reclamo ni cambios». Así, tan simple como se lee. Si no votas, será mejor que bailes al son que te toquen y «sin derecho a pataleo».

 

Es importante recordar algo, en el caso de una elección preaidencial, que es el caso del cual hablamos, el presidente electo va a tomar decisiones que comprometen a todo un país, es decir, que si votaste por él o votaste por el candidato que perdió igualmente te vas a ver beneficiado o afectado por las decisiones que tome el nuevo presidente. La diferencia radica es en que si no ejerces tu derecho al voto, no deberías quejarte luego de lo que pueda suceder porque tu no aportaste tu granito de arena para marcar la diferencia.

 

Quizás sea cierto que un voto no va a hacer la diferencia, pero ¿cuántos son los apáticos a estos procesos? Son muchos, me atrevería a decir que esas personas si pueden darle un vuelco total a las elecciones y, a fin de cuentas, a los resultados. Entonces si eres parte de un grupo importante, el de la abstención. Pero tienes la oportunidad de salir de ese grupo y traer a tus amigos que tampoco les interesa la política contigo.

 

Recordemos, este 7 de octubre no se escoge entre desayunar sandwich o arepa, en estas elecciones se disputa nada más y nada menos que la silla presidencial; por eso es tan importante. La idea de esto no es sugerirte que votes por algún candidato, sino simplemente que votes, por quien tu quieras pero vota. Concluyo con una frase que está usando el canal Globovisión para incentivar al voto y que me parece bastante acertada: Votar es gratis, abstenerse cuesta muy caro.

 

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