EDITORIAL #131: “LA PARÁBOLA DE LOS CIEGOS”

El cuerpo del hombre es vulnerable, y en su fragilidad, está expuesto a recibir cualquier golpe. Lo que desde cerca el hombre mantiene apartado de sí con habilidad y esfuerzo, puede fácilmente alcanzarle desde lejos. Todas las tradiciones antiguas lo llenan de alabanzas y renombre, pues fue en busca del peligro y le hizo frente. Se hizo enemigo de alguien y lo desafió. Su intención era hacer frente al mayor peligro y jugárselo todo de forma irrevocable. Por lo tanto, la satisfacción que le produce sobrevivir puede convertirse en una pasión peligrosa e insaciable. Cuanto más grande sea su victoria frente a su opositor más intensa e imperiosa serán sus ganas de combatir y demostrar su poder.

 

Todo proceso acarrea a un héroe, pero basándose en el resultado final y no en sus méritos. La incapacidad de reconocer su carácter paranoico contra el poderoso, lo lleva a desafiarlo y hacerle frente en un campo desigual. Considera que el peligro se encuentra  en todas partes y en su deseo de vencer cierra con astucia y precaución su propio camino.

 

Una minoría de los venezolanos no cree en regímenes de poder, ya que ante las adversidades responde a los momentos históricos y a las necesidades. “No somos capaces, necesitamos disciplina, esto no lo arregla nadie”,  recurre a la figura del Padre de la Patria y termina desarrollando un patología que lo conduce a agradecer el castigo.

 

Los venezolanos padecemos tanto desorden y confusión que nos hemos acostumbrado a que podemos movernos sin limitaciones, sin importar que en nuestro camino puede encontrarse alguien más,  sufriendo desmanes de subalternos engrandecidos.

 

En Venezuela hay muchas cosas en marcha. Hay muchas voluntades sembrando esperanzas. Gobiernos, en su medida, y particulares, por doquier, han acometido la tarea de darle a muchos lo esencial. Por lo que, todo cuanto aprendamos de nosotros mismos, del mundo que nos rodea, de la vida, arraigo nacional y socialización, encontraremos los pilares y procesos para desarrollar nuestra conciencia social, definiendo limites y responsabilidades.

 

 

María José Castro

Directora Editorial

@MJ_Castro

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