BUENO, BONITO Y… TURÍSTICO
Por Paola Méndez García
@AP_MG
Aunque el tráfico nos coloque de mal humor y la inseguridad sea el pan de cada día, Caracas está llena de lugarcitos y rincones hermosos que no puedes dejar de visitar. No hace falta contar con mucho dinero ni intentar ser Valentina Quintero para conocer el lado bonito y gentil de nuestra ciudad. Por eso, a continuación, una pequeñísima muestra de lo que esconde tan polémica urbe.
Plaza Los Palos Grandes: con apenas tres años de inaugurada, esta plaza ha sabido ganarse el corazón de todos los caraqueños. De forma ingeniosa, reúne un módulo de salud, una biblioteca, una cafetería, conexión Wi-Fi, un estacionamiento subterráneo (allí se encuentra el mural “Coloritmmo” de Miguel Acosta), contribuyendo a mejorar la calidad de vida de los vecinos del municipio Chacao.
Este agraciado lugar posee grandes bancos perfectos para descansar tomando una siesta, pero el verdadero gancho es una divertida fuente de chorros de agua, donde los más pequeños suelen tomar baños mientras juegan y los más grandes observan divertidos. La fuente se activa a las 6:00am, 9:00am, 12:00pm, 3:00pm y 6:00pm. La Plaza Los Palos Grandes, además, sirve para lugar de encuentro de ciclistas, corredores y demás deportistas. También, allí se practica yoga y periódicamente se realizan cambalaches de libros.
Mercado Municipal de Chacao: es el lugar ideal para comprar vegetales y frutas frescas, pero haciendo de una
simple compra toda una experiencia ya que, además de hacer el mercadito y comer deliciosos pasteles y jugos, se puede caminar con calma, observar a los demás compradores y vendedores e incluso encontrarse con algún amigo o conocido. El lugar es bastante bonito, cómodo y dinámico puesto que está distribuido en niveles que permiten el orden de los puestos según los productos a ofrecer.
Bulevar de Sabana Grande: lleno de historias… ¡Simbólico! Alguna vez tuvo prestigiosas y populares tiendas donde seguramente nuestros padres hicieron más de una comprita. Actualmente, esos establecimientos ya no están, pero se puede caminar completo desde Chacaíto hasta Plaza Venezuela porque, afortunadamente, presencia de buhoneros no hay. Gracias a las labores de PDVSA La Estancia, el paseo cuenta con pavimento nuevo, aceras libres y bastante cuidadas y pequeños parques infantiles para el disfrute de los niños que por ahí transitan junto a sus padres. La cita obligatoria en estos 1,6Km es con el legendario Gran Café, la librería Suma, el callejón La Puñalada y unos ricos golfeados de la panadería Pan 900.
Teatro Municipal de Caracas: diseñado bajo los cánones
europeos y con más de 100 años, ha visto nacer y crecer infinidad de espectáculos para el disfrute de los asistentes. Se encuentra ubicado en el centro histórico de la ciudad y su fachada hace rememorar la Caracas de techos rojos. Recientemente, la Alcaldía del Municipio Libertador en conjunto con Fundapatrimonio, restauró en su totalidad el interior del recinto. Aunque actualmente es la sede de la Orquesta Sinfónica Municipal de Caracas, obras de teatro y recitales nunca faltan para el disfrute de todas las familias.
El Calvario: su nombre real es Parque Ezequiel Zamora, no obstante todos los caraqueños lo conocen como «El Calvario». Por un tiempo estuvo abandonado, pero en el año 2010 recibió el cariñito que tanto merecía y actualmente es de carácter obligatorio visitar el lugar. Noventa escalones dan la bienvenida y también quitan el aliento, aunque, la verdad, vale la pena. El público visitante podrá disfrutar de una plazoleta, la capilla Nuestra Señora de Lourdes, el Café Venezuela, la Sala de Lectura Paula Correa y caminos llenos de sombra y verdor. Los paisajes y panorámicas de Caracas que ofrece el parque, le robarán suspiros a más de uno al enamorarse nuevamente de nuestra complicada capital.
