Tic tac tic tac… ¡Llegó la Hora del despertar Ciudadano!

Por Winston Flores

@zonademocratica

 

 

               

Después de tres décadas de “revolución” los problemas del país parecen salidos de una caja de pandora aquella de la mitología griega que encerraba todas las desgracias de la humanidad desatadas al ser abierta por la ambición desatada de aquellas manos que se hundieron en lo más profundo donde solo se encuentra dolor, pena, rabia y la inconformidad y desesperanza, pero cuenta la leyenda que en ese oscuro fondo quedó prisionera la esperanza.

 

Los regímenes totalitarios llegan pregonando esperanza que luego trasmutan en algo muy peligroso como imponerse por el miedo y la costumbre, herramientas que saben utilizar muy bien los dictadores como base fundamental para sustentar su poder, adormeciendo con su retórica a los pueblos.

 

En medio de esta fotografía, nos encontramos dando una lucha, la cual comienza por el rescate de los valores éticos y morales que están perdidos en el fondo de un cofre de inmensos tesoros que se llama Venezuela.

 

A pesar de las penurias, el tic tac del reloj comienza su cuenta regresiva y eso se puede palpar no solo en las encuestas, sino que se ve y se siente cuando tocas de primera mano el sentimiento popular, y, es ahí donde me ubico, durante mis viajes por el país, promocionando la iniciativa del Congreso Ciudadano para la reconstrucción nacional, experiencia viva que me ha convertido en testigo privilegiado del levantamiento ciudadano. La gente con fuerza alza su voz y camina al encuentro de su propia realidad. Es así como de norte a sur, de este a oeste a todo lo largo de la geografía nacional, al unísono, reunidos en sus asambleas, todos discuten la situación de emergencia que vive el país. Hacer un recuento de todos nuestros males, podría tomar muchas horas o días, lo que si no puede tomar más tiempo es la organización, la sinergia y la articulación de los ciudadanos, que dicho sea de paso, más que nadie están claros en su rol fundamental para la recuperación de la democracia y la reconstrucción del país en la búsqueda de un futuro para todos.

 

Los hombres y mujeres en la calle son los protagonistas. Son ellos los que hablan y dicen de forma categórica: “que antes de ser madres y padres, antes de ser mecánicos, antes de ser panaderos, antes de ser abogados, antes de ser militares, antes de ser ingenieros, antes de ser médicos, primero son ciudadanos. Ellos, cansados ya de los atropellos por parte del Régimen Todopoderoso, llaman a cerrar filas alrededor de nuestro gentilicio como venezolanos, sin distinción de raza, credos o posición social. Los ciudadanos están claros que la unidad nacional comienza por sentirse líder, ese líder que TU llevas por dentro, como la esperanza en el fondo del baúl, esa esperanza que está intacta en los barrios, sectores, urbanizaciones, gremios, sindicatos, partidos políticos, sociedad civil, en fin en el alma colectiva que escucha con fuerza el TicTtac del reloj que marca el inicio de la cuenta regresiva.

 

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