Carta a la Oposición y al Gobierno: “Necesitamos recuperar urgentemente el país”

Estimados integrantes de la Oposición y el Gobierno Nacional:

Quien les escribe es un ciudadano preocupado… Por la situación actual en el país, por los altos índices de inseguridad que ni los gobiernos regionales y municipales han logrado atacar, cada día vemos en los medios de comunicación y en redes sociales como a nuestros conciudadanos los roban o matan sin ningún tipo de misericordia o respeto por su dignidad humana, caminar así sea 200mts se ha convertido en una odisea casi epopéyica, nos hemos convertido en prisioneros en nuestras propias casas, en víctimas del miedo latente en nuestro país.

Me encuentro preocupado por la falta de producción nacional, que ahora está en un 30% o menos, que cada día encontramos muchos productos para abastecer nuestros comedores… Y más en esta época decembrina, hemos recurrido a traer productos de fuera… y nuestros campos están cada día más abandonados. Nuestra tierra muere ante el abandono y la ineficiencia de los que están al cargo de ella.

Me preocupa el exorbitante aumento del “Dólar Paralelo” que ustedes como actores políticos no se han encargado de desmentir, solo le han dado una fama inmerecida. En vez de aplicar políticas cambiarias eficaces y exactas, hemos visto como nuestra moneda (llamada en honor al Libertador) se desprecia día tras día… hasta llegar a emitir un billete de 50.000 (50 millones de los de antes del “Bolívar Fuerte”) La capacidad económica y de ahorro del Venezolano ha quedado reducida a nada.

Me preocupa la poca atención ante los hechos que se reportan en la actualidad, vemos como para un licenciado o graduado de una universidad, sale mejor ser “bachaquero” o “trabajador Informal” que trabajar en una empresa consolidada en el país, vemos como el “sueldo mínimo” quedo en nada, comparado a lo que puede ganar un “buhonero” o “bachaquero”. Lo que hace que muchos de nuestros talentos decidan irse a rumbos donde sí puedan ser tomados en cuenta.

Me preocupa la invisibilización de los problemas cotidianos de nuestra ciudadanía; situaciones como el aumento de las personas en situación de calle ha ido en aumento; personas hurgan en la basura en nuestras comunidades en busca de alimento o algún medio de subsistencia; niños en la calle bajo la inconsciencia de sus padres forzados a trabajar vendiendo flores o caramelos en cualquier esquina; lugares como el Metro de Caracas que se llenan de vendedores ambulantes y de las respectivas mafias de estos “vendedores”; que la cultura en nuestro país tenga que pasar por los censores ya sea nacionales, municipales o regionales… Opinar se ha convertido en un pecado mortal para cualquier ciudadano.

Vemos medios cerrados, censurados o en clara amenaza de cierre. Directores presos y periodistas amordazados y la libertad de expresión (no confundir con libertinaje) secuestrada por supuestos “Defensores de la Libertad” que se esconden tras avatares o pseudónimos celestiales… El amarillismo y la desinformación comandan en ambos bandos.

Estamos en una especie de “País Prisión” en donde nuevamente estamos en una encrucijada llamada “Mesa de Diálogo” que sucumbe las esperanzas de la nación. A ustedes actores de esta mesa les invito a que se den una vuelta por el país. Dejen el diálogo retrógrado y actúen en pro de recuperar la nación, dejemos las mezquindades y odio. Es claro que el camino debe ser democrático, pero inmediato. Si seguimos así no creo que lleguemos todos hacia 2018, ya que esto y muchos problemas más forman parte de un caldo venenoso que amenaza con cubrir a la nación de sangre y muerte. Que hay que liberar a los presos de conciencia… Sí pero no debemos liberar a cualquiera que haya cometido algún crimen contra la nación, que haya llamado a atacar a hermanos de patria.

Esta mesa de diálogo debe convertirse en una mesa para la recuperación de la democracia, la república y los valores en nuestra nación. Decirle adiós a más de 17 años de discursos de odio y división. Atacar la discriminación venga de donde venga. Somos hermanos de esta nación, de nada vale enfrentarnos en esta lucha por el poder.

Nuestro enemigo no está al lado o al frente, está en aquellos que desean revivir los años donde la voz de uno solo era la voz de la nación, evitemos esto a toda costa. Reconstruyamos la nación juntos.

Si perdemos la nación… Perderemos toda razón para vivir por esta gran República.

Atte: Un ciudadano preocupado por su país.