VOTAR ¿LA SALIDA?
Por Fabiana Crisci
Luego de tantísimos y seguidos procesos electorales nuestro país se enfrenta de nuevo a un arduo reto, votaciones municipales. Una vez más nuestros electores tiene la difícil tarea de decidir el camino que recorreremos. Si bien en varios casos la falta de compromiso ciudadano junto a la abstención han sido los grandes protagonistas, esta vez dudo que sea la excepción; pues aunque tienen una gran responsabilidad en sus manos muchos están decepcionados.
Venimos de tres procesos que han sido moralmente muy fuertes para el bando opositor, y en el último y casi peor, nos enfrentamos a un total y rotundo fraude. Sin embargo existe quienes piensan que a pesar de los fatídicos resultados, la oposición ha ganado espacio en el terreno de juego; hay quienes opinan que por fin se vislumbró la “trampa” que hacía el Consejo Nacional Electoral; y otros, quienes solo ven factores negativos… Pero en lo que sí estamos de acuerdo es que asimilar la derrota no ha sido tarea fácil.
En todo caso, las oportunidades para oposición son cada vez más complejas, incluso a pesar de que el tema electoral preocupó a la comunidad internacional. Los hechos abrieron la oportunidad a los dirigentes políticos de presentar a los países vecinos nuestra difícil situación, logrando mostrar ante el mundo un sistema electoral fraudulento y mentiroso, se planteó la violación de nuestros derechos, solicitamos el apoyo de organizaciones… y ahora, que nos enfrentamos ante el mismo “monstruo” ¿por qué ceder ante ellos y seguir legitimando al CNE?.
¿Cuál es la estrategia de la oposición? No está claro. Pues hasta hace un par de meses era mostrar al mundo pruebas de fraude y desprestigiar el sistema electoral. Sin embargo, ante unos nuevos comicios, es algo que parece haberse olvidado. ¿No es contradecirse ante sus electores que tal vez no entienden de estrategias políticas, y que sólo saben de sus problemas? Posiblemente este factor sume una abstención masiva y sumamente peligrosa para el bando opositor.
¿Cómo explicar a quienes se sintieron burlados y engañados por el CNE que ahora, luego del fraude, deben votar? El Consejo Nacional Electoral no cambiará su táctica; exigimos condiciones que no se cumplieron el 14 de abril, ¿por qué debería ser distinto ahora? No es necesario un extenso análisis para observar que continuamos repitiendo un error del que no nos damos cuenta. La oposición está encaminada a tropezarse con las mismas piedras. Algo estamos haciendo mal, y tal vez ese error sea preocuparse más por los cargos públicos que por su credibilidad.
Votar siempre es un arma a favor de elector, pero sabiendo que nos enfrentamos a un régimen totalitario, ¿es la salida? Si bien tampoco podemos buscar la solución en las instituciones secuestradas por el Gobierno, la discusión no está votar o no votar sino en las alternativas que deben buscar los dirigentes. Y claro, una de esas opciones era la comunidad internacional, pero aceptar unas elecciones en las mismas condiciones ¿no es deslegitimar totalmente sus acciones?
Se avecina una dura elección para la que debemos estar preparados una vez más, pues aquella emoción que logró encender Capriles el 14-A, luego del fracaso del 7-O y 16-D, dudo mucho que esté presente esta vez. ¿Pero qué pasa si ganamos? ¿Cómo queda la oposición ante esos “chavistas” que votaron por nuestra opción? ¿Cómo nos verá el mundo? Pareciera que los dirigentes, y no precisamente Capriles, no quiere terminar de abrir los ojos y darse cuenta de sus errores, parece que no han aprendido la lección. Los políticos deben incluir todas las formas de pensamiento, replantear sus compromisos y reflexionar para llevar a cabo acciones realmente eficientes.
@Fabiana_Crisci
