Cultura, Periodismo, arte y Norkys Batista

Por Julián Fejure

@JulianFejure

 

 

 

Uno de los valores que le hace falta a la sociedad venezolana de esta llamada revolución socialista antimperialista de doble moral es el cultivo de la responsabilidad, de llamar las cosas por su nombre propio y dejar de lado ese adjetivo de PRESUNTO que al parecer se ha puesto de moda como favorito de todos los seguidores de este imperio rojo.

 

Ahora resulta que los nuevos culpables del alto índice de violencia en nuestro país son los artistas y en especial figuró el nombre de una mujer que más allá de hacer su trabajo como actriz ha dejado siempre muy en alto y en claro cuáles son los deseos que tiene para Venezuela. Me refiero a Norkys Batista, una mujer humilde que con esfuerzo y sacrificio logró echar pa´lante y abrirse campo dentro del modelaje, el miss Venezuela y la actuación, una mujer que más allá de interpretar el papel de asesina en la novela De todas maneras Rosa del canal de la Colina es antes que nada una venezolana.

 

Como cualquier ser humano posee integridad física y moral, aspecto que al parecer nuestro icónico Presidente no parece importarle en lo más mínimo al referirse a ella como UN MAL EJEMPLO PARA LOS VENEZOLANOS POR INCENTIVAR A LA VIOLENCIA Y A LA FORMACIÓN DE ANTIVALORES y por si esto no fuera suficiente, resulta que ahora todo el gremio artístico es culpable de toda la masacre que se vive día a día en esta patria que ha superado a Iraq en lo que a muertes se refiere.

 

Como comunicador social me pregunto si es que programas como La Hojilla son el ejemplo de construcción de sociedad del que el Sr. Maduro habla en cada uno de sus mítines y reuniones, esos programas que se transmiten en VTV en donde los entrevistados se aprenden un enorme guión en donde reina la falsa alegría de un pueblo que cada día se hace más miserable, en donde un puño acompañado de la frase “no volverán” se convierte en ícono y slogan de un partido político, en donde personajes como Andrés Izarra se burlan de analistas a través de medios internacionales. Si es así es de suma importancia que las escuelas de Comunicación Social y Artes Dramáticas se pronuncien al respecto puesto que esta visión se aleja abismalmente de la ética impartida a los estudiantes de estas profesiones en las distintas aulas del país.

 

Se propone una revisión del contenido programático de todos los canales de televisión para disminuir la violencia que generan ciertos programas, en especial las novelas, que transmiten los diferentes medios de comunicación del país pero debemos recordar que la época dorada de nuestra pantalla se generó producto de la calidad de las novelas, esas que reflejaban la problemática social latente en esos tiempos y que en la actualidad se ha visto reducida producto del cierre de medios de comunicación, por los altos costos en la producción y por la fuga emergente de talentos invaluables de nuestra pantalla. Atrás quedaron aquellos programas que se hacían con público en el estudio y totalmente en vivo, el brillo de concursos tan importantes como el Miss Venezuela y esos programas de concursos que más que entretener buscaban EDUCAR a toda la población.

 

El espionaje que realiza la Ministra de Comunicación e información, Delcy Rodríguez a los artistas y periodistas en los aeropuertos internacionales debe servir más bien para RECUPERAR la calidad de la programación televisiva venezolana y no caer en errores como TVES, un canal que no ha cubierto ni uno solo de los objetivos propuestos, debe servir para RESCATAR el futuro de los miles de jóvenes que estudian periodismo y que en este momento se hallan preocupados en sus salones por la escasez de empleo y las dificultades para ejercer esta carrera en las calles de nuestro país. En vez de estar buscando la culpa en otros cuando ya todos sabemos quién es el que verdaderamente la tiene por no poseer la mínima idea de cómo gobernar un país, por no buscar generar fuentes de empleo y por comprar conciencias con “poquitos” aplaudamos el talento de nuestro país que más allá de interpretar y caracterizar un personaje nos deja bien plasmados ante el mundo entero y sienten profundamente el significado de SER VENEZOLANO. Dedíquense a desarmar realmente a los malandros y no a seguir destruyendo lo poco que queda de la televisión en Venezuela.

 

Muchos se preguntarán por qué empecé nombrando a Norkys Batista y es que es muy sencillo, porque es humilde de corazón, pura de alma, excelente profesional, porque ha vivido en carne propia la violencia del país (como muchos otros artistas y ciudadanos de a pie), porque ha sentido el profundo dolor de perder a alguien, porque detesto que un hombre insulte a una mujer y porque ha sido un saco de kick boxing para múltiples personas que solo ven una parte de su ser y no a ella como un todo, como ser primeramente HUMANO, porque para mí como periodista es indignante ver como poco a poco muere mi profesión en Venezuela, como nuestro lenguaje se desdobla, como poco a poco colegas se van por culpa de esa inseguridad que primeramente se crea en casa y que en segundo lugar aplaude este nefasto gobierno, porque he sido víctima de robo de mis pertenencias en 14 oportunidades (incluyendo un secuestro), porque hoy en día estoy a punto de colgar mi título universitario en una pared y dedicarme a otra profesión por miedo a cubrir una noticia en la calle, porque hoy día veo que las personas corren para llegar a casa antes de que el sol se oculte (yo soy una de ellas), porque la vida no vale nada en este pedazo de tierra, porque no pude ver los Orgasmos en Puerto la Cruz y porque para mí ella es uno de los muchos ejemplos de guáramo, valentía y fuerza que actualmente existen en nuestro país (y que hacen falta ahora más que nunca), porque es íntegra, porque la admiro y porque es tan VENEZOLANA como yo (a pesar de tener apellido extranjero) y como todos y cada uno de los que vivimos en este pedacito de tierra.

 

Esta serie de situaciones que se vienen suscitando solo hace que se generen más inconformidades y violencia en las calles, avenidas y autopistas de nuestro país, razón por la cual espero que Dios bendiga a Norkys, a todos los artistas y periodistas que hoy luchamos por hacer de Venezuela un mejor país para vivir, que buscan personificar una realidad con la que tenemos que convivir día a día, por hacernos disfrutar de una justicia inexistente en las leyes pero presentes en los libretos y guiones de tv, que buscan mantenerse dentro de este medio que nos envejece tan rápido y que durante mucho tiempo no se ha refrescado con talentos nuevos, que esperan la llegada de la evolución comunicacional que tanto merecemos, por tantos jóvenes que esperan una oportunidad pero sobre todo porque podamos volver a trabajar en equipo como gremio que somos, como la televisión que somos, como el entretenimiento social que representamos y dejemos de lado intereses de partidos políticos de turno que nos distancian y hacen más difícil la construcción de esa sociedad cargada de valores y progreso que tanto necesitamos.

 

SIGAMOS ADELANTE QUE NO HAY MAL QUE DURE CIEN AÑOS NI CUERPO QUE LO RESISTA – TODO INICIO SIEMPRE TIENE UN FINAL.