En los 30 años de Cedice Libertad: América Latina “La libertad es el futuro”

Por Luis Rodríguez

@Luisert

 

Mónica Duarte

@M0n1k1ta

 

 

 

Con ocasión de los 30 años de la organización CEDICE Libertad, intelectuales, políticos, economistas y liberales de toda Iberoamérica llenaron el Centro Cultural Chacao por dos días en los que la esperanza, el progreso y la libertad fueron los protagonistas.

 

Desde el jueves 24 de abril, los asistentes desbordaron las instalaciones del teatro de Chacao para disfrutar del encuentro internacional “América Latina: La libertad es el futuro”. Con la presencia destacada del premio Nobel de Literatura, Mario Vargas Llosa, su hijo Álvaro Vargas Llosa, el periodista y escritor colombiano, Plinio Apuleyo, el presidente de la fundación ATLAS, Alejandro Chafuen, la parlamentaria argentina, Patricia Bullrich, los representantes estudiantiles venezolanos y la diputada y líder opositora María Corina Machado, entre otros.

 

Los planteamientos expuestos recogieron ideas políticas y económicas en torno a la democratización de Venezuela y América Latina. Las reflexiones sobre la situación actual del país y las voces de solidaridad con las protestas se hicieron un común denominador entre todos los conferencistas. Las banderas de libertad ondearon en torno a ideas muy diversas, cada panel de conferencista abordó un tópico diferente que permitió debatir y encausar las ideas en temas estratégicos. Las ponencias abordaron ideas tan variadas como el futuro energético y petrolero, el ejemplo del progreso chileno, corrupción y narcotráfico, populismo y totalitarismo, los problemas de la inflación, las políticas de seguridad exitosas, el papel de los intelectuales en la batalla de las ideas, la juventud y el futuro, el rol del parlamentario y la cultura como promotora de la libertad.

 

La inauguración estuvo a cargo del comité organizador y los alcaldes anfitriones Ramón Muchacho y Antonio Ledezma, quienes aprovecharon la oportunidad para expresar su descontento sobre la situación política de Venezuela. El primer ponente extranjero fue Mario Vargas Llosa, quien expresó su optimismo en cuanto al futuro que le espera al país y su plena confianza en el movimiento de resistencia que llevan a cabo los jóvenes venezolanos.

 

La mañana del jueves estuvo marcada por la intervención de José Luis Cordeiro, venezolano y profesor de la Universidad de la Singularidad, quién afirmó que “en 20 años no se usarán más petróleo”. Por su parte Luciano Quadri, de la secretaría del medio ambiente mexicana, reflexionó sobre los peligros ambientales y económicos que representan los subsidios a la gasolina y la importancia de diversificar las fuentes energéticas más allá de los combustibles fósiles. Luego el director ejecutivo de la Fundación para el Progreso, Axel Káiser, recibió una lluvia de aplausos por su intervención en la cual destacó la importancia del modelo político liberal y la batalla de las ideas como la vía hacia el progreso.

 

En la tarde se distinguieron las palabras de Juan Carlos Hidalgo, costarricense de CATO institute, a favor de la legalización de la droga como la mejor vía para acabar como el narcotráfico. Durante el Panel IV, denominado “Los enemigos de la libertad”, también se habló del populismo y la corrupción que “Castiga a los pobres mucho más fuerte que lo que afecta a los ricos”, de acuerdo a Alejandro Chafuen de Atlas Foundation. Más tarde, la clase media fue el centro del debate y se subrayó su importancia como la promotora del trabajo y el esfuerzo individual, la meritocracia y la educación. Este panel contó con las palabras de Federico Hilzendeger, director del Instituto de Estudios Empresariales en Brasil, quien explicó que ese país “El aumento de la clase media se dio por el crecimiento de las oportunidades de trabajo y no por la repartición de riqueza por parte del gobierno”. La jornada culminó con un debate acerca de la inflación y la política fiscal, donde la clase magistral dictada por el presidente del Centro de Investigaciones sobre la Libre Empresa en México, Luis Pazos, dejo risas y reflexiones.

 

Para el segundo día del evento se reunieron Cayetana Alvarez, directora de relaciones internacionales de FAES España, Joseph Humire, director del Centro de Seguridad para una Sociedad Libre, y Marcela Prieto, directora del Instituto Ciencia Política de Colombia. Quienes coincidieron en la importante labor que desempeña el estado como promotor de la seguridad. Marcela Prieto llevó a debate el conflicto interno en Colombia y su relación con la violencia venezolana quedando como conclusión la triple responsabilidad de los cuerpos policiales, los servicios públicos y las instituciones como garantes de la seguridad.

 

Los problemas que enfrenta la libertad de expresión en Venezuela también tuvieron voz en el foro a través de las palabras de Plinio Apuleyo, quien dijo estar preocupado por el futuro de los medios venezolanos. Finalmente, llegó el turno de los jóvenes y los representantes estudiantiles hicieron sentir su presencia, recibidos con aplausos expusieron sus razones para luchar, los estragos que ha dejado la represión en número e imágenes, la unión que dicen va a seguir caracterizándolos, y para al culminar sus ponencias rompieron el protocolo para bajar de la tarima, acercarse a Mario Vargas Llosa y entregarle una bandera de Venezuela junto a una camisa del movimiento estudiantil, este expresó luego que ese momento lo había conmovido más que ganar el propio premio Nobel.

 

La tarde del viernes inició con la intervención de la diputada María Corina Machado que se refirió a la democracia viva «En los jóvenes que están luchando en las calles, en los periodistas que exponen la verdad, en los trabajadores y dirigentes sindicales». La parlamentaria también hizo referencia a las etapas del plan denominado La Salida, indicando que la primera ya se cumplió y que restan otras tres «La primera etapa consistía en despertar a Venezuela y despertó». Señaló que la segunda etapa tiene tres grandes objetivos, siendo el primero la recomposición absoluta de los poderes para lograr instituciones autónomas (CNE, TSJ, Contraloría General y Fiscalía General), el segundo conquistar la libertad de los presos políticos y el tercero presentar la alternativa política que, indicó, ya existe. Por último Machado se refirió a la transición democrática como tercera y última etapa.

 

La clausura del evento estuvo a cargo del intelectual Mario Vargas Llosa, quien a través de preguntas y respuestas intercambió ideas con el presidente de RCTV, Marcel Granier, y el periodista César Miguel Rondón.

 

Marcel Granier, y César Miguel Rondón, se intercambiaron los papeles de entrevistadores y entrevistados para dar una forma particular a la última conferencia del evento donde pusieron en “Primer Plano” a Vargas Llosa. Paseándose por todas las facetas del intelectual peruano, lo abordaron con preguntas históricas, económicas, políticas y sociales en una charla estimulante y conmovedora. El premio Nobel confesó que en sus tiempos de simpatizante de la revolución cubana vio a los revolucionarios como “seguidores de Robin Hood que se subían a la montaña de Sierra Maestra a luchar contra un dictador”, escenario parecido al de una novela de caballería que terminó desencantándolo con la discriminación homofóbica ejercida contra los propios revolucionarios, entre ellos amigos del escritor; además, relató su único encuentro con Fidel Castro. Para Vargas Llosa, la crisis democrática vivida en algunos países Latinoamericanos se debe a la frágil tradición democrática, el desprestigio de los partidos políticos por no avanzar al mismo ritmo de las sociedades y la insistencia en un modelo caducado.

 

“Venezuela ya es otro país, algo ha comenzado a ocurrir aquí desde hace un par de meses y la nación se está moviendo, la mueven los jóvenes. Este movimiento a mi parecer es irreversible”, dijo entre aplausos. El literato se declaró un optimista ante la situación de Venezuela y explicó que la salida dependerá de la sensatez de los líderes, en quienes confía plenamente como unidad para avanzar. Insistió en la importante labor de los empresarios y aplaudió a Marcel Granier por su actuación ejemplar como promotor de la libre empresa.

 

Al terminar, se puso de pie y dio unas últimas palabras de aliento y agradecimiento a los asistentes, y al grito de “¡Viva Venezuela libre!” terminó su intervención. Para culminar el evento el alcalde Metropolitano, Antonio Ledezma, le otorgó una condecoración por Ciudadano Ejemplar.