¿Somos humanos los venezolanos…?

Por Rafael Villegas

@rajovia

 

 

 

En el muy renombrado “plan de la patria”, presentado por el actual presidente de Venezuela, ante la Asamblea Nacional como una nueva fase de la revolución bolivariana, se esgrime como aliciente la palabras del ahora llamado comandante eterno: “Someto al pueblo cinco grandes objetivos históricos y como su palabra o como la misma palabra lo dice, son históricos porque vienen de lejos, de atrás… se ubican en la perspectiva del tiempo por venir, nos trascienden a nosotros mismos, trascienden el tiempo de ayer, trascienden el tiempo de hoy rumbo al tiempo del mañana, son los grandes objetivos permanentes, históricos».

 

Dentro de estos “grandes objetivos permanentes”, es más que resaltante, bien sea por lo ambicioso, por lo demagógicamente absurdo, o tan sólo por lo extremadamente cursi pavoso, el quinto objetivo: “PRESERVAR LA VIDA EN EL PLANETA Y SALVAR A LA HUMANIDAD”.

 

Este quinto “objetivo” se traduce (según ellos) en la necesidad de construir un modelo económico productivo ECOSOCIALISTA (?), basado en una relación armónica entre el hombre y la naturaleza, que garantice el uso y aprovechamiento RACIONAL Y ÓPTIMO de nuestros recursos naturales, respetando los procesos y ciclos naturales de los mismos.

 

Es decir, según este brillante y luminario, “plan de la patria”, los esfuerzos y buenas intenciones de todo lo que se haga, dentro de la revolución, deberá ser realizado para salvaguardar y proteger nuestros recursos, para llevarnos a ese “buen vivir viviendo” del que tanto hacen mención, y estamos claros en que el ciudadano promedio de Venezuela se siente excluido cada día más.

 

Este quinto gran objetivo, supuestamente, convoca la sumatoria de esfuerzos para impulsar un movimiento de carácter mundial que sirva para contener las causas y erradicar los efectos del cambio climático que ocurren, sin lugar a dudas (según ellos), como consecuencia del despiadado modelo capitalista imperialista depredador.

 

Ahora bien, todo este plan “ecosocialista” basa su cumplimiento en muchos objetivos que dicen tanto pero, que no dicen nada, salvo que se debe establecer el modelo salvador del socialismo, aún y cuando muchas de las premisas enmarcadas en sus objetivos generales y específicos chocan con el “deber ser” del socialismo que se vive en nuestro país en muchos aspectos.

 

En resumidas cuentas, los objetivos estratégicos y generales, vienen dado por algunos de los siguientes puntos:

  1. Garantizar, promover, impulsar de manera colectiva nuevos procesos de producción y valorización de conocimientos científicos para la preservación, conservación y aprovechamiento “sustentable” de la diversidad biológica y de los reservorios de agua del país.
  2. Se hacen incontables referencias para el enfoque de esfuerzos que permitan garantizar, impulsar, desarrollar y promover una conducta nacional que “impulse la transformación de los patrones insostenibles de consumo propios del sistema capitalista.
  3. Incentivar la producción bajo los esquemas ancestrales y tradicionales, de modo que se haga frente al modelo productivo implementado por el nefasto y explotador sistema capitalista.
  4. Mejorar sustancialmente las condiciones socioambientales de las ciudades, mediante el uso e implementación de tecnologías ahorradoras de energía, así como el uso de las llamadas energías limpias (eólicas, solares, gas, etc.), así como también el desarrollo de medios de transportes públicos eficientes y de bajo impacto ambiental.
  5. Contribuir a la conformación de un gran movimiento mundial para contener las causas y reparar los efectos del cambio climático, que por supuesto, por enésima vez, son gracias al modelo capitalista depredador.

 

Ahora, hoy día, luego de más de un año en que fue presentado este “plan de la patria”, no sólo podemos darnos cuenta que este “objetivo histórico” es más de la perorata revolucionaria, que más que buscar soluciones, busca crear una imagen de proceso protector de todo lo bueno, porque según ellos el socialismo, que ellos aún no terminan de implementar, es bueno y mucho mejor para el planeta que ese nefasto capitalismo.

 

Sin embargo, de esos objetivos estratégicos, que buscan proteger a la “raza humana”, no pasan de unas simples palabras escritas, ya que en la realidad, triste y lamentable, es más nefasta, consumista y depredadora que ese sistema capitalista que tanto denigran.

 

Podemos observar en cualquier región del país, cómo grupos de personas adeptas a la revolución, en pro de conseguir una vivienda digna a futuro, realizan invasiones de áreas verdes, con sus consecuentes deforestaciones y alteraciones desmedidas en el ecosistema de esa zona, quedando a la buena fortuna el destino de todas las aguas residuales, así como todo desecho fisiológico de toda persona que ocupe cada habitáculo “residencial” que allí se ha construido.

 

En las ciudades que se suponen deberían ser mejoradas “sustancialmente”, cada día que pasa el caos es la orden del día: estancamientos viales (mayor consumo de combustibles), derrames de aguas blancas en cuanta esquina se puede ver; obras inconclusas, o que marchan a paso de tortuga, generando cualquier cantidad de polvos y gases, que afectan la salud de quienes transiten a diario por sus cercanías; cierres de parques, plazas y demás áreas verdes, por tiempos inestimados para culminación y reinauguración; aumento en la contaminación del aire, debido al crecimiento en el uso de plantas eléctricas operadas con diésel o gasolina, dentro del sector productivo y comercial, para compensar las fallas del sistema eléctrico, sin mencionar su incidencia en el efecto invernadero que provocan.

 

Y en todo este resultado, para PRESERVAR EL PLANETA Y SALVAR A LA RAZA HUMANA, no podemos dejar de lado, el recurso más importante, tanto para el planeta, como para toda la raza humana: EL AGUA. Esa agua que sale de nuestros lavabos, duchas y demás grifos, esa agua que aunque a veces, salga cristalina, no deja de ser imperceptible el “aroma” de calidad con que llega a nuestras casas.

 

Cuando el gobierno chavista en cumplimiento del LEGADO DE SU ETERNO COMANDANTE, a través de su plan de la patria, se refiere a que desea, de manera ambiciosa y “desinteresada”, salvar a la raza humana del capitalismo depredador, entonces, en vista de los resultados obtenidos hasta la fecha, cabe preguntarnos…

 

Qué somos los venezolanos para el chavismo…?…Acaso consideran que somos humanos los venezolanos?

 

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