Defensa de los jóvenes

Por Gloria Cuenca

 
 

 

Para los jóvenes que no se resignan

 

La vejez es dura. No es fácil perder la juventud. Sólo se resigna una cuando piensa: si no envejezco, es porque me muero. La alternativa, no es precisamente lo mejor. Como no hay más que hacer, toca aceptar. He encontrado paz y aceptación en esta edad, al analizar los aspectos ganados. Ha sido gracias, justamente: a la experiencia, al conocimiento de la vida y de la gente, al hacer un balance de mi existencia, encuentro que las cosas positivas, superan a las negativas, ¡Gracias a Dios! Aun cuando, suene pedante soy una mujer realizada, eso lo primero y he vivido suficiente y con mucha intensidad cada etapa de mi vida adulta, cómo para añorar los años idos y mi juventud, en donde cometí demasiados errores, y, por supuesto, también logré aciertos y éxitos. Invito a los de mi generación a revisar su propia vida. ¿Por qué esto? Al escuchar a los amigos de la tercera y cuarta edad, mis contemporáneos, juzgar, si juzgar, con severidad inaudita, la actuación de los jóvenes luchadores democráticos venezolanos, de sus líderes, de sus dirigentes, de los partidos políticos, entre otros, no puedo sino sorprenderme. ¿Se olvidan de los errores y disparates qué cometimos? ¿Cómo aprender sin actuar? ¿Qué pasa? Estos jóvenes, han arriesgado su vida, (algunos la perdieron), su seguridad, su libertad, (algunos en la cárcel), sus estudios y demás intereses particulares, para actuar en defensa de la democracia y en la búsqueda del futuro. Por supuesto cometen errores, ¿y, quién no? No saben a quienes se enfrentan. ¿Cómo saberlo? Jóvenes, llenos de confianza, de ilusiones, y sí algún error hemos cometido nosotros, los que conocemos con quien nos enfrentamos, es no haberlos denunciado y presentado como son en verdad: comunistas de corte estalinista, totalitarios, de pensamiento único y que simulan ser demócratas, con objetivos oscuros y nunca dicen verdades. A estos jóvenes les ha tocado luchar contra un régimen terrible con vinculaciones internacionales, (Cuba y China) con el dinero del país que ellos creen les pertenece. Con los valores al revés y la corrupción campante, son tratados de manera equizofrenizante. Si, el lenguaje que expresan esos estalinistas es psicótico. De alguna manera buscan enloquecer a sus seguidores, por cuanto no tienen ninguna congruencia en su vida. ¿Ser rico es malo? ¿Y, si es así, por qué son corruptos y se enriquecen, hasta más no poder? ¿Aman al pueblo? ¿Y, lo ponen a pasar trabajo, hambre, abandono y crisis hospitalaria y de salud? Mientras ellos van a las mejores clínicas, se ven con médicos de verdad y mandan a los ingenuos a los CDI, con médicos cubanos, que no se sabe sí son, efectivamente médicos o no. Engañan constantemente a sus seguidores, haciéndoles una enorme cantidad de promesas y mentiras. Solo mensajes de propaganda. A todo esto se enfrentan nuestros jóvenes, con valentía y coraje. Hay que apoyarlos siempre. Asesorarlos cuando lo pidan, escucharlos con atención para entenderlos y comprenderlos. ¡Qué orgullo siento!

 

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