¿Y los Muertos qué?

Por L.J.Tang

 

 

 

Ahora el enfoque de sectores de la Oposición, comenzando por el caído en desgracia, Capriles, se esta direccionando a las futuras elecciones Parlamentarias del 2015. Difícil es expresar, sin caer en términos soeces, la furibunda emoción que esto causa, mas que emoción sentimiento, uno de profunda decepción.

 

Y es que pensar en estos momentos en el nuevo teatro electoral, una fachada más de esta Dictadura tropical, cuando hace unos meses venezolanos caían frente a los desmanes represivos del Régimen, y veíamos como la careta democrática se venia abajo y llamábamos cabalmente a este sistema un autoritarismo violador de los derechos humanos; es una acción no solo contradictoria sino irresponsable y ofensiva a la nación misma.

 

Dejad que ponga más clara y directa tal contradicción de monumentales características:

 

Esto es una Dictadura, una con un marco virtualmente democrático, con una aparente división de poderes públicos que no es tal. Sabemos, los que tenemos ojos y oídos, y una visión panorámica de la sociedad, que esto no es realmente un régimen democrático. Si algo tuvo de positiva la crisis que comenzó el 12 de Febrero del presente año es que fue un siniestro instrumento del Destino para develar la verdadera naturaleza de esta Revolución. No olvido a los funcionarios del SEBIN que disparaban a los estudiantes en Parque Carabobo, ni ustedes deberían hacerlo.

 

Es con esta visión represiva en mente, y muy fresca pues ni un año a pasado, que se pretende ir a unas elecciones con una Dictadura. En otras circunstancias me reiría de la magnitud de tal oxímoron pero el momento que vive la Patria me lo impide. Es consabido que una elección es por naturaleza consensual, por lo que el mero hecho de aceptar batirse electoralmente con el Régimen le da validez democrática, y esta demás señalar que es un insulto descarado a todos los que padecieron la brutal represión de la GNB y la PNB, incluyendo heridos, fallecidos y desaparecidos.

 

Este es un país de memoria corta, ya se ha dicho, por tal razón hay que repetir las cosas, y me rehusó a permitir que se borre de nuestros recuerdos lo que aconteció hace apenas unos meses, hacerlo seria ir contra mis principios y valores.

 

La pasividad de nuestra gente raya en la indolencia, y me declaro enemigo del venezolano indolente, el que se queja del Gobierno pero que fácilmente olvida a los que se sacrificaron por un futuro mejor y esta dispuesto a jugar un teatro electoral que solo le dará un argumento más a la Robovolución para alegar que todo aquí esta perfecto y que somos la mejor democracia del Mundo.

 

La Oposición piensa en votos y en el curul de turno, no en Venezuela, eso está claro. En el seno de los Partidos se habla únicamente de ganar tal representante, tal diputado, de designar tal dirigente popular para esta y aquella zona, que gane la plancha, para luego ayudar a su gente, y solo a su gente, que eso quede claro. Lo sé porque he estado allí, y no como militante, nunca he pertenecido ni perteneceré a los burdeles políticos que pretenden dirigir los destinos de Venezuela. Allí solo existen ambiciones, para ellos los eventos de febrero no acontecieron, solo importa el futuro del Partido. Imposible no sentirse decepcionado y asqueado.

 

Solo la idiotez patológica podría justificar el continuar el juego democrático con una Dictadura, eso y la ambición partidista histórica de esta desafortunada nación.

 

¿Y los muertos de los enfrentamientos pasados? ¿Qué paso con Bassil Da Costa? Estoy seguro que su madre aun lo llora, y lo hará hasta el final de su vida. ¿Y Robert Redman, quien cargo a Bassil al momento de su partida y luego, horas mas tarde, era asesinado? ¿Recuerdan a los arrollados “accidentales” durante las protestas? Yo me acuerdo de José Ernesto Méndez, ¿lo recuerdas tú Capriles? ¿Recuerdan las violaciones de los derechos más fundamentales por parte de la GNB? O tal vez como Capriles, o el vergonzoso y defenestrado Aveledo, no respiraron los gases de las bombas lacrimógenas en Altamira, de las que muchos tuvieron secuelas, eso es irrelevante.

 

¿Los que recibieron perdigones a quema ropa cuentan? ¿Los mutilados importan? O si nos vamos más atrás se acuerdan de cuando llamaban a Maduro “el ilegitimo” y que no debía reconocerse su “fraudulento triunfo” hasta que se contaran las actas. ¿O eso se olvido?

 

Si se les olvido no se preocupen, tengo excelente memoria y se los recordare permanentemente.

 

Quien crea en Capriles a estas alturas es tan ciego como los que creen en el Chavismo, esa quimera del trópico. Yo sí recuerdo a los muertos, a los que padecieron la represión, y no hay día en que se me olviden las horas de zozobra e incertidumbre. No, yo no olvido, es un crimen contra la consciencia de la humanidad el hacerlo. Capriles, no tienes respeto por la dignidad del venezolano. Vergüenza es poco.

 

¿Y nuestros muertos que? ¿A nadie le duele?