Otra mirada…

Por Mairim Peraza

@perazamairim

 

 

 

En lo que va de año he tenido el placer de disfrutar de ciertas actividades que no conocía, a pesar de mis años, he aprendido el lado divertido de leer y como hay gente que comparte esa misma aflicción, escribir artículos y no morir en el intento, degustar cerveza criolla, de reciclar comida, ganar premios, regalar cultura, verle otra cara a mi ciudad, como dar en adopción mis libros y no llorar en el intento, disfrutar de regalarles felicidad a unos niños y sobre todo conocer personas realmente especiales.

 

A todas esta le cuento esto es porque, mientras disfrutaba de todas esas actividades, me detenía a pensar, será que estas personas que organizan estos eventos no se dan cuenta que Venezuela esta pasando por unos momentos muy difíciles? Será que no les afecta la escasez? Les alcanza el dinero? No les importa que, en mi opinión estamos en un caos político? O será que sencillamente yo soy muy pesimista y no le veo el lado bueno a las cosas.

 

            He seguido asistiendo a los eventos, o cuanto bochinche cultural se me presente y este a mi alcance, pero ya con otra visión, y es la de espiar a esas personas, que parecen tener una formula mágica para tener optimismo en organizar dichas cosas.

 

            Pues para mi mayor sorpresa, es que ellos no es que están con los ojos vendados, si no todo lo contrario, descubrí, que son verdaderos luchadores, guerreros, que no se dejan apaciguar porque la cosa esta difícil, que la gente no le gusta salir, que casi nadie regala porque todo esta caro, que hay mucha inseguridad, que el sol calienta más que antes, que están poniéndose viejos y los chamos no les prestan atención.

 

            Resulta ser que ellos creen que nuestra Venezuela (es de todo, no se nos puede olvidar), se merece otro destino y no podemos dejar de luchar por eso, no nos podemos olvidar que aunque todo este difícil, no esta imposible de mejorar, que si pusiéramos el mismo empeño en tratar de sacar a relucir las bondades de nuestra ciudad, como lo tenemos para quejarnos, ya los cambios estuvieran más notorios.

 

            Se me olvidada, decirles que el nombre que tienen estas personas es de EMPRENDEDORES, que no entendía muy bien su significado, pero en pocas palabras son personas que no tienen miedo por trabajar en su país y cumplir sus sueños, yo especialmente les regalo un aplauso y un gran abrazo por mostrarme otra cara de mi país.

 

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