Todo lo que implica el 06 de diciembre

Por Antonio Andrade

@AndradeAntonioJ

 

 

 

Considero importante que más allá de escribir sobre tendencias, deben establecerse escenarios que puedan de cierta manera poder avecinar lo que nos pueda deparar el destino tanto en la cita histórica con la democracia que tenemos el 06 de diciembre, como los días posteriores al conocimiento de los esperados resultados.

 

Todos hemos podido ser testigos de la creciente intensidad que se ha venido generando cuando ya falta poco más de un mes para que los venezolanos decidamos, no solamente nuestros representantes al parlamento, sino un vehículo que sirva para transmitir las realidades que día a día  soportamos, y que son paulatinamente más difíciles y más complicadas. Es importante señalar que estas pueden catalogarse como las elecciones donde el heredado proceso revolucionario se encuentra con uno de sus mayores retos, pero aunque las principales encuestadoras a nivel nacional nos presenten un panorama favorable para los factores de la oposición por un margen mayor al 20%, no seré yo parte de aquellos ingenuos que piensan que ya pueden cantar victoria.

 

Cuando hago esta aseveración no me manejo sobre la base de hechos aislados, sino sobre realidades y comportamientos estratégicos de los cuales ya hemos sido testigos los venezolanos; en estas elecciones del 06 de diciembre, el chavismo ciertamente apabullado por una gestión nefasta y desastrosa, cuyas consecuencias económicas afectan la calidad de vida de los venezolanos y generan casi un 80% de rechazo, deberá hacer “de tripas corazón” para que sus candidatos no despierten efectivamente a sus maquinarias por una cuestión de efectividad y de un proyecto que realmente vaya a traer soluciones efectivas a través de la legislación, sino por lo contrario fortalecer las bases ideológicas sembradas por Hugo Chávez, cuya permanencia pareciera ser la única esperanza de estos sectores.

 

Es importante resaltar que estos círculos revolucionarios, organizados a través de las UBCH, patrullas y jefaturas de patrulla, poseen un mecanismo que debe ser objeto de respeto y cuidado, pues representa una cuantiosa movilización de votantes cuyo criterio no está fundamentado por la convicción de que los candidatos chavistas son los que efectivamente van a atacar el desabastecimiento, la inseguridad, la inflación, y los demás problemas que azotan a los venezolanos, sino que se fundamenta netamente en una ideología enquistada.

 

Al otro lado de la moneda encontramos a una oposición cuyo escenario y posicionamiento basado en las encuestas, resulta el más favorable en unas elecciones directas tras 15 años de lecciones y aprendizaje tras aprendizaje, el cual a mi criterio, sigue sin despertar completamente a una dirigencia que ciertamente presenta a unos candidatos, pero que sigue sin presentar una propuesta seria que no esté basada en las criticas a una gestión que ciertamente se critica por sí sola.

 

A manera de anécdota cuando conversaba con un compañero, luego de conocer la mayoría de los candidatos a las parlamentarias de la oposición le decía que no estaba seguro, si estaba leyendo una lista de candidatos, o los créditos de “Jurassic Park”, (Antonio Barreto Sira, Alfonso Marquina, Omar Barboza, Henry Ramos Allup, Julio Borges, Ismael García, entre otros), pues se deja claro que parecieran seguirse cometiendo los mismos errores de las cúpulas, se siguen cerrando las puertas a una generación de relevo,  y donde se siguió un procedimiento de primarias para lo cual se necesitaba contar con un capital millonario y donde se despreciaron ciertamente los liderazgos comunitarios con lo que es imposible poder presentarse de la mejor manera a unas elecciones circuitales/parroquiales.

 

En el mismo orden de ideas los factores de la oposición a pesar de que cuentan con una numerosa diferencia que se impone por ante el desastre, esto no significa que esta realidad plasmada en unas encuestadoras, vaya a representar una intención de voto favorable, por lo que es necesario que a poco menos de un mes de campaña se acrecienten los esfuerzos en pro de lograr una estructura organizativa que permita tomar el descontento de las calles y traducirlo en las urnas electorales a favor de los candidatos del cambio y el progreso.

 

Habiendo analizado todo esto, y no por ello menos importante considero necesario aseverar que el resultado de estas elecciones que serán luchadas y realmente complicadas, representará una estocada fundamental al destino político y económico del país, para una oposición crecida, golpear a un chavismo debilitado, seria demostrar que existe una nueva mayoría de venezolanos que efectivamente están cansados de tantos atropellos  y esperan un poder legislativo plural que abra las puertas a una transformación profunda, y por otro lado para un chavismo debilitado, derrotar a una oposición desorganizada significaría la agudización de un sistema fracasado, y la toma de nuevas medidas y ajustes económicos que han sido engavetados por ahora, para no perjudicar más un ya complicado escenario electoral.  ¡Dios guarde los destinos de esta noble nación y escuche los clamores de este pueblo!

 

¡Dios Bendiga a Venezuela!