Petróleo venezolano fluye entre decadencia y rentismo
Con el reventón del Zumaque I en pleno verano de 1914, el petróleo brotó del suelo venezolano. De ser un país con una modesta economía agrícola, pasamos al ojo de la geopolítica mundial como los poseedores de las mayores reservas en todo el globo. Para 1975 el entonces presidente Carlos Andrés Pérez, nacionaliza la industria del crudo, hoy en manos de la estatal: Petróleos de Venezuela Sociedad Anónima, (PDVSA). Pero del mito de la “Venezuela Saudita”, solo quedan perspectivas tan negras como el codiciado recurso.
Miembros de la asociación civil Gente del Petróleo, y el sindicato Unapetrol, manifestaron las adversas condiciones que atraviesa el sector energético y se evidencian principalmente en un elevado descenso en la producción: “De 2 millones 797 mil Barriles Diarios en 2001, pasamos a la decadente cifra de 2.097.000, destacó el comunicado. Mientras la operatividad caía en picado, la nómina de PDVSA creció de 62 mil 284 a un total de 166 mil 337 empleados, para octubre de 2015.
En 14 años dejaron de procesar unos 700 mil barriles diarios, pero se duplicó el número de familias cuyos ingresos son proporcionales al desarrollo del sector.
Industria en el subsuelo
Nelson Hernández, ingeniero especializado en energía, adjudica a la gestión de PDVSA la pérdida de 1 millón de Barriles Diarios, en comparación con los niveles productivos de 1988. Junto a otros analistas, coinciden en señalar el 2002, (año en que el ex presidente Chávez despidió a 23 millones de trabajadores), como el punto de quiebre:
“A partir de ese momento, comenzó la destrucción lenta pero constante de PDVSA, que ha aflorado en los últimos 4 años, con un escenario que presenta entre otras cosas: la importación de Gasolina Diesel, GLP , y un déficit de Gas Natural”, afirmó en: «PDVSA un ave fenix que no resucitará”, artículo publicado en su blog: la pluma candente.
La falta de inversión, resuena como otro de los factores que intenta explicar la decadencia de una empresa que llegó a ocupar el segundo puesto en el ranking mundial de productoras de hidrocarburos: “la caja registradora, no recibe los ingresos esperados, bien sea por una baja en el nivel de precios o por los subsidios internacionales. Esto ha originado un déficit que conlleva al incumplimiento con los proveedores de servicios petroleros, dejar de cancelar deudas con empresas expropiadas y la no repatriación de los beneficios de los socios de las empresas mixtas. Es decir, todo un “default técnico”, destacó el energista en la mencionada publicación.
Hernández desmitifica la explotación de 4 millones de Barriles Diarios, provenientes de la Faja Petrolífera del Orinoco para el año 2019, basándose principalmente en la escasez de crudo ligero importado, para mejorar la calidad del Petróleo extra pesado que se extrae de allí, aunado a las precarias condiciones de las refinerías nacionales :
“Esta situación, que de algún modo hasta 2012 se vino manejando sin mayores efectos visibles, debido a los altos precios del petróleo y gracias a la procura de importantes préstamos internacionales, dejó hoy a PDVSA y al país sin recursos para afrontar los cambios estructurales que en materia de petróleo y de energía se han venido consolidando a nivel global durante los últimos 10 años” Subrayó Juan Luis Martínez, especialista en el área.
Un mercado de Gigantes emergentes
Las condiciones para el comercio del crudo han cambiado sustancialmente en los 42 años, transcurridos desde la nacionalización de nuestras reservas:
“En la actualidad hay una sobreoferta de petróleo alrededor de los 2 millones de barriles diarios, esto ha originado que los países productores, especialmente la OPEP, busquen mecanismos que permitan reducir la producción con el objeto de lograr un equilibrio en los precios. Este acuerdo iniciado hace 30 días, ya ha presentado indicios de su no cumplimiento. Sin embargo, Estados Unidos ha iniciado nuevamente un incremento en su producción de petróleo y gas proveniente de las lutitas, (rocas sedimentarias), con lo cual se vislumbra una nueva caída de precios, es decir, regresar a niveles de 30 a 40, dólares por barril”, explicó El energista, Nelsón Hernández.
Ante estos escenarios PDVSA se encuentra en desventaja: “ la industria petrolera venezolana es totalmente estatizada. Las reformas legales introducidas desde 1999 y la discrecionalidad de funcionarios de alto nivel hacen muy difícil establecer acuerdos duraderos con socios de alta capacidad técnica y financiera. Eso coloca a Venezuela en franca desventaja ante otros países productores. Esta situación se hace más compleja en un ambiente más competitivo como el actual”. Sentenció Martínez, desde su experiencia, como ingeniero mecánico en la PDVSA de hace 22 años.
¿Qué desafíos hay que superar para alcanzar el equilibrio de los precios?
JLM: “ El Mercado se equilibra solo. Hoy se puede asegurar que está más equilibrado que hace 20 años, cuando la OPEP junto con Rusia, México y Canadá controlaban más del 50% de la capacidad mundial de producción.
NH: “Hoy en día quien hace el equilibrio son los productores de los yacimientos lutiticos, ese rol lo perdió la OPEP, especialmente Arabia Saudita.
Cultura Rentista Ancla al Subdesarrollo
La llegada del Oro Negro no solo transformó la economía nacional, si no que implantó en el Ideario Venezolano un falso e imprudente ideal de opulencia infinita, sin embargo la realidad es otra, en su artículo Futuro inmediato de la industria Petrolera Venezolana, Juan Luis Martínez , derrumba esa riqueza ilusoria:
“En más de 50 años se puede constatar que la economía venezolana basada en el petróleo, por lo menos de la manera como se ha administrado, no ha contribuido en absoluto a mejorar la calidad de vida de su población”, escribió el ingeniero.
Con cifras del Banco Mundial, Martínez demuestra que nunca fuimos un país rico, sino una nación con grandes recursos mal administrados: “En 1960 Venezuela era uno de los países con mayor ingreso per cápita en el mundo, comparable con los países más desarrollados. Para 2004, en lugar de aumentar, nuestro Producto Interno Bruto, se redujo en un 16%. Entre 1960 y 2014, el PIB alcanzó un descenso del 2% anual.
El especialista en petróleo y asesor financiero, asegura en su escrito que para recuperar la rentabilidad de la industria es necesario, un crecimiento acelerado de la producción en los años venideros, algo que es imposible de lograr sin participación del sector privado y bajo el actual sistema fiscal .
El 14 de Julio de 1936 el diario caraqueño Ahora ,público un editorial que en 2017, luego de 80 años mantiene vigencia en cada palabra:
«Urge aprovechar la riqueza transitoria de la actual economía destructiva para crear las bases sanas y amplias y coordinadas de esa futura economía progresiva que será nuestra verdadera acta de independencia. Es menester sacar la mayor renta de las minas para invertirla totalmente en ayudas, facilidades y estímulos ala agricultura, la cría y las industrias nacionales. Que en lugar de ser el petróleo una maldición que haya de convertirnos en un pueblo parásito e inútil, sea la afortunada coyuntura que permita con su súbita riqueza acelerar y fortificar la evolución productora del pueblo venezolano en condiciones excepcionales.»
Desestimamos el consejo de Arturo Uslar Pietri, no sembramos el petróleo como él quería, y por eso hoy tenemos una cosecha distinta: El rentismo como un ancla férrea para nuestra economía, la cadena que hemos de romper.