Bromas de mal busto

La rapidez con la que un hecho bochornoso se hace viral por Internet es realmente sorprendente, sobre todo si se trata de un personaje de lid. Los memes y gifs no tardan en aparecer en teléfonos y ordenadores para alegrar los ratos libres de cualquiera.

Porrazos, respuestas ignorantes, descuidos de celebridades, fallos ante porterías vacías, y hasta obras artísticas horrendas;  todas son materia prima para los ociosos que generamos y compartimos ese tipo de contenidos.  Eso sí, siempre hay alguien que se siente aturdido por las descontroladas burlas, ya sea porque es el protagonista del acontecimiento, porque tiene un familiar a quien le ha pasado algo igual, o porque simplemente le dio un atacazo moralista y quiso defender al afectado. A veces es necesario que alguien lo haga.

Aquí expongo un caso reciente que causó risas en todo el mundo, no con intenciónes de criticar a quienes lo disfrutan, pues hasta yo me reí de los montajes hilarantes que hizo más de un ingenioso, sino por tratar de exponer lo que hay detrás del chiste, con el fin de provocar una reflexión para que la próxima vez que vuelva a ocurrir algo similar, busquemos qué hay de trasfondo, al menos por adquirir cultura general.

Merecido reconocimiento

El 29 de marzo de este año, uno de los mejores futbolistas del mundo, y sin duda el más destacado en la historia del fútbol portugués (con el permiso de Eusebio), le dio su nombre al Aeropuerto Internacional de Madeira, la tan emblemática isla del país europeo. Fue un reconocimiento a la trayectoria de un hombre que no solo destaca como jugador, sino como familiar, empresario, modelo, filántropo…sí, como un Tony Stark deportista.

A pesar de que hubo controversia por personas que se opusieron al cambio de nombre del recinto, el evento fue bien recibido por gran parte la comunidad lusitana, el propio Cristiano y sus familiares. Ahora no solo tiene museos, hoteles, marcas de ropa y accesorios, sino también un aeropuerto internacional.

Esta vez, el astro madeirense de carne y hueso no fue el protagonista de la ceremonia, sino su nueva versión de cobre. Ahora, un busto suyo adornaría la fachada del lugar para hacerle honor a su figura.

El inesperado artista

El hombre que está a la derecha en la fotografía de arriba es el autor del comentado objeto. Emanuel Santos, un tipo cuarentón, nacido en Madeira, sin profesión, desempleado, casado y padre de un niño de 5 años. Un apasionado que por voluntad propia, consiguió la oportunidad de destacarse y mostrar su talento ante la opinión pública, la que luego se encargaría de tomar su obra como motivo de risas.

No tiene empleo fijo desde enero, de hecho el último fue en el departamento de limpieza del aeropuerto. Es autodidacta, no ha tenido mayor influencia académica en su desarrollo como artista y profesional. Fue él mismo, quien al enterarse de que se realizaría la alteración en la denominación del lugar, acudió a los responsables para hacer la propuesta. Expuso su idea y las autoridades le dieron el chance de avanzar.

Lo hizo, le tomó 15 días moldear en barro el rostro millonario de CR7. Colocaba fotografías extraídas de internet a un lado de su lugar de trabajo, así se fijaba en cada detalle de su cara y lo plasmaba con sus manos. Lo terminó, lo mostró ante la dirección del aeropuerto y estos quedaron contentos. Faltaba la aprobación del modelo.

No hubo ningún encuentro entre Santos y Cristiano antes de la ceremonia. Fue a través del hermano del vigente campeón europeo, que Ronaldo observó en fotografías el busto ya cubierto de yeso. Al artista le hicieron saber que le había gustado, y sólo recibió órdenes de acomodar unas arrugas en el ojo izquierdo, que de acuerdo a CR7, lo hacían ver más viejo.

Santos apenas había realizado una obra profesional en toda su vida, un homenaje a pescadores ubicado en una redoma de la región donde reside, Caniçal. Además trabaja actualmente en otra, que será un reconocimiento a los leñadores de la Ribeira de Machico.

Es evidente que su hoja de vida es realmente escueta como para ser el encargado de embellecer un establecimiento tan importante. Pero, de que tiene talento, lo tiene. Hay que destacárselo, sobre todo si nunca recibió instrucción académica en el arte.

El punto es que todo parecía indicar que el busto sería un éxito, y con éste, Santos estabilizaría su presente y futuro. Consiguió una buena tajada, pues los directores le aseguraron una significativa cantidad de dinero por su trabajo. Entonces, solo faltaba mostrarle al mundo lo que había logrado con su esfuerzo, pero lastimosamente, lo que venía encaminándose como la oportunidad perfecta para deslumbrar con sus habilidades, terminó manchándose con las mofas.

El producto final

Al parecer, la cosa cambió cuando el busto fue culminado. Una vez que la etapa del barro finalizó, la escultura fue cubierta en yeso por otro especialista y posteriormente, otro experto la bañó con el metal. Incluso, para este proceso, la obra fue trasladada al continente y luego devuelta a Madeira. Según Santos, fueron esos momentos que alteraron las facciones del rostro, tanto que él mismo se sorprendió cuando lo vio el día de la celebración.

En el evento no pudo ni preguntarle a Cristiano si estaba satisfecho, pues apenas le dio tiempo para saludarlo y tomarse fotografías con él y su familia, mas aclaró que según lo que pudo conversar con los parientes del dorsal 7 del Real Madrid, parecía que sí les agradaba la pieza. Incluso, reseñan los periodistas que mientras el autor daba declaraciones, se escuchaban elogios de quienes admiraban la escultura de cerca, caso contrario a lo que se ve en redes sociales.

Pareciera que el principal problema que tiene el retrato, es que el rostro es desproporcional en relación al tamaño de la cabeza, como se puede notar en la comparación de arriba. Su cara luce mucho más pequeña e inclinada hacia un lado. De resto, sí hay un parecido, y de perfil luce mucho mejor, pero en líneas generales, el busto deja mucho que desear.

A comparación con otros retratos de Cristiano, este es el de menor prominencia, pues sólo fue enfocado en su rostro y elaborado por alguien desconocido. Sin embargo, nunca una escultura suya había sido tan compartida y comentada, ni siquiera aquella que lo mostraba con una protuberancia exagerada.

 

Un ejemplo poco convencional

El artista confesó que no ha reaccionado muy bien ante las incesantes burlas, pero aun así busca el lado positivo. “Mi objetivo era proyectarme, porque estoy comenzando a dar mis primeros pasos. Siendo crítico de mi trabajo, yo mismo deduje que habían pormenores que podrían haber quedado mejor”, declaró al medio O Jogo.

Santos adora el fútbol, es hincha de Benfica y Real Madrid. Admira a Cristiano más que a cualquiera, sobre todo por ser de la misma tierra. No es fan de Messi, como muchos aseguraron de forma irónica después de ver el busto por primera vez. No cabe ninguna insinuación de que lo haya hecho con malas intenciones.

A pesar de que no fue perfecto, el ejemplo que deja este hombre es digno de reconocer. De limpiar en el aeropuerto, a ser el autor del retrato artístico más reciente de la persona más popular de su país natal en la actualidad. Tuvo las agallas de llevar la propuesta ante ejecutivos que probablemente ni sabían quién era.

Algunos como yo, si acaso sabemos dibujar una pestaña. Si el trabajo de alguien se hace viral y se convierte en objeto de burlas a nivel mundial, es muy probable que esa persona caiga en depresión y ni siquiera quiera hablar del tema. No todos tienen la fortaleza para afrontarlo.

Por el contrario, Santos ha dado la cara a muchos medios de Portugal y otros países de Europa. Hasta ha tenido que escuchar risas de los periodistas durante entrevistas, y aún así nunca perdió la cordura y respondió abiertamente manteniendo el respeto. Ya está en marcha su próxima obra, y poco a poco puede demostrar que tiene destreza para el arte.

¿Ven lo interesante y motivador que puede ser la historia de un chiste? Para la próxima, volvámonos a divertir con las ocurrencias, pero no dejemos de buscarle el lado reflexivo. Celebremos las formas de expresarse de críticos y artistas.