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Últimos Artículos
La conjura contra Venezuela
por Luis Barragan
Ellos viven en un sueño y nosotros en una pesadilla” Roth (*) Viejas y controversiales posturas políticas de Philip Roth no impiden el amplio reconocimiento a su obra literaria. Capaz de domiciliarse en la vida cotidiana estadounidense, sobre todo en la
La representación y el tiempo digitales
por Luis Barragan
Reflexión inconmensurable, la del tiempo. Apenas, retenemos la noción de que si no existiese, todo – absolutamente todo – transcurriría simultáneamente, aplazando una vez más nuestra vieja pretensión de adentrarnos en los copiosos suburbios de la filosofía. La consabida pandemia, inesperada
Iztoria Hoficial (sic)
por Luis Barragan
Los regímenes comunistas y aún más los organizados delincuencialmente, imponen una iztoria hoficial y hofiosa (sic) descaradamente falsa. Confiscada una determinada filosofía de la historia, forman y pretenden formar a las nuevas generaciones sobre una mentira que estalló con la célebre y simbólica caída
Pender de una gota de petróleo
por Luis Barragan
“De los codos no es fácil salir, a menos que se tenga la voluntad de hacerlo, y quien esté contando con la providencial historia para escapar al desastre, está aviado (SIC)” Juan Nuño (*) Asombra al mundo que un país de
De la arquitectura bibliotecaria doméstica
por Luis Barragan
Fallido propósito para la cuarentena, es de suponer que jamás lograremos el deseado reordenamiento casero de libros y papeles que no genere sentimiento de culpa por lo desechado, aunque – a veces – el desprendimiento a ciegas es un buen camino
Sugerencia para una novela ajena
por Luis Barragan
» – Seguro. Mire, vengo desarmado … Yo quiero saber si algo que yo creo que me pasó hace ,muchos años pudo ocurrir de verdad o si son imaginaciones mías ..» Leonardo Padura («Adios, Hemingway») Recientemente, falleció la señora Blanca Rodríguez,
La dichosa palabra
por Luis Barragan
Desde hace un buen tiempo, dejó de atraparnos la programación televisiva y, con el destierro de los servicios de suscripción en Venezuela, como DirecTV, afianzamos definitivamente otros hábitos de entretenimiento personal. Reducida la oferta cultural que la pandemia ya ha finiquitado,
Infusión
por Luis Barragan
En Venezuela no atravesamos una de las dictaduras más o menos circunstanciales de la que acostumbró el continente. En propiedad, hablamos de un régimen de inequívoca orientación comunista, informado por las mafias que le ofrecen un novedoso sello, capaz de subvertir
De la escritura auditable
por Luis Barragan
Hábito de muchos años, escribir es un acto de aprehensión de las realidades que pronto se diluyen, adquieren rápidas versiones, integrándose al arsenal psicológico que también nos amuralla frente a un constante, contradictorio y feroz asedio. A veces, convertimos el bolígrafo
Armando Rojas Guardia, campo minado
por Luis Barragan
Pertenecemos a una promoción generacional que creció con el continuo y espeso aguacero del país dinerario que juró navegarlo por siempre, pivotado por las más insólitas vanidades. E hizo – también – de la postergación de sus problemas y traumas cruciales,
Venidero aniversario citadino
por Luis Barragan
Semejante a El Ávila, la desconocida alcaldesa menor de Caracas pretende renombrar la emblemática autopista Francisco Fajardo. So pretexto de una larga controversia histórica e historiográfica, rayando en la antropología cultural, el Estado Fallido ensaya con el ejercicio del inadvertido poder
Del tiempo impreso
por Luis Barragan
Vana ilusión, la cuarentena no ha alcanzado para todas las tareas por siempre postergadas. La creímos holgada, dispuesta para llenar y vaciar continuamente el tintero, pero la sola angustia de sobrevivir a un régimen en sí mismo, pandémico, ha imposibilitado la
Del espesor de las estanterías
por Luis Barragan
Apegados al formato convencional, hoy, el libro sabe de distintas versiones informáticas para recorrer las redes e interpelar al navegante que prefiere las aguas ligeras. El internauta promedio tiene, por lo general, una frágil embarcación y lo banal le es una
Geología inversa: la pira de los libros universitarios
por Luis Barragan
Profundamente conmovidos por el reciente incendio de la Biblioteca Central de la Universidad de Oriente (UDO), en Cumaná, participamos de la inmensa marea de indignación que no llegó a tiempo para evitarlo. Aquejados por toda suerte de vicisitudes de la pandemia
Destelevisados
por Luis Barragan
Un vecino, conocido por muchos años, recientemente nos comentó que jamás – desde la más remota infancia – vio televisión, por lo que es totalmente indiferente ante la desaparición de las cableras, como genéricamente solemos denominar el servicio por suscripción, aunque fuese
Fumar a las costillas de la pandemia, por ejemplo
por Luis Barragan
Quienes todavía somos fumadores, esperando dejar por siempre el ya pernicioso oficio, la situación ha sido muy apretada durante la cuarentena. Además de la escalada de los precios, sin que sea fácil hallar un local que los expenda, por el reducido
De la bibliofilia digital
por Luis Barragan
La quiebra editorial del país, inadvertida por las grandes mayorías apremiadas por las más elementales necesidades, nos ha llevado al hábito de la también penosa lectura en pantalla, trátese de una laptop o tableta, dificultado el kindle y sus equivalentes, si de novedades y divisas
Covid19 y arte
por Luis Barragan
Inesperada y también maliciosa, la temporada universal de la pandemia amenaza con extenderse y, seguramente, dándole un íntimo sello humano a la experiencia, el arte no tardará en dar cuenta de sus dramas. Distinguiendo la propia naturaleza de los países afectados,
Felipe Izcaray o la intimidad de los audífonos
por Luis Barragan
La inmensa dificultad de reencontrarnos con nosotros mismos, durante la prolongada cuarentena, habla de las radicales tensiones e incertidumbres que nos asedian al cumplirla en un país como Venezuela. No obstante, podemos también aludir a un constante reajuste de la convivencia
Páginas para una pandemia ineludible
por Luis Barragan
Quizá porque las dos guerras que se dijeron mundiales en el XX, no llegaron a este rincón del mundo, como toda que se precie, nos hicimos la ilusión duradera de una lejanía insalvable frente a cualesquiera acontecimientos trágicos, allende la mar.