CIUDADANOS QUE EXIGEN

Por Francisco Alfonzo

@FranciscoAlfonz

 

 

 

Imaginemos el siguiente escenario por un momento. Venezuela es un país de 31 millones de habitantes, de los cuales 18 están inscritos en el registro electoral. Bueno, de ese total de electores, la mitad es 9, y el 80% de esas 9 millones de personas, distribuidas proporcionalmente entre los 23 (+1) estados del país, no están conformes con su situación actual, se sienten peor que antes y no han alcanzado la suprema felicidad en estos 15 años (ni haciendo ministerios para ello).

 

Para manifestar legítimamente ese desacuerdo ciudadano, la gente decide espontáneamente ir a las plazas y espacios públicos, a conversar sobre ello entre la considerable población que, en esa localidad, no está de acuerdo con varias de las cosas que han sucedido últimamente en el país (corrupción o narcotráfico, derechos humanos, etc.), ni con la disminución de su calidad de vida (inseguridad o escasez, salario, inflación, desempleo, vivienda, luz, agua, vialidad, etc.).

 

¿Qué tiene de malo que cada uno de los que, en este país, no estemos de acuerdo con varias cosas que han pasado desde el gobierno en los últimos años, o meses, salgamos a expresar libremente esas molestias? que nos indignan como ciudadanos.

 

Todos nosotros merecemos muchísimo más de lo que apenas hemos podido lograr en los últimos 15 años, y lo sabemos (solo que algunos se hacen los locos). No hemos mejorado como país, ni tampoco ha habido evolución en nuestra situación personal, o familiar, ¿por qué no expresarlo libres y sin miedo a represalias? Tenemos derecho a ejercer  libremente nuestro derecho a la protesta y a la expresión, por todos los medios que queramos hacerlo, pero sobre todo en asamblea ciudadana, en las principales plazas y vías públicas de nuestra debilitada República.

 

Muchas personas confabulan en la opinión pública sobre los próximos “escenarios” y las posibles “salidas” a la crisis actual. Se habla de una Asamblea Nacional Constituyente, se murmura sobre un levantamiento magnicida imperial, se escucha el 350 constitucional, que si las elecciones de diciembre o el referendo revocatorio en 3 años. Pero, ¿qué tiene de malo si le pedimos la renuncia a Nicolás?

 

Los ciudadanos estamos en el derecho de exigir un verdadero país, (nos pretenden engañar con que “tenemos Patria”), y no hemos tenido nada parecido desde los últimos 15 años. Los funcionarios públicos (del Presidente para abajo) están a nuestro servicio, al de los ciudadanos, pero desde hace 15 años ninguno parece funcionar y/o servir.

 

¿Por qué no consideramos seriamente la posibilidad de que se le solicite públicamente la renuncia al Presidente? Que desde hace un año para acá ha conducido a la “Patria” a un verdadero pantano.

 

Y es que, en cualquier país serio, democrático y con madurez política, la situación actual es como para que ponga su cargo a la orden el Presidente que, desde hace menos de un año, ha sumido a la Nación en una profunda crisis social, económica y hasta institucional.

 

La cosa está tan mal, que no creo que nadie sea capaz de hacerse cargo de la responsabilidad que implica reparar esta gran nación que, es verdad que estaba mal, pero más bien ha involucionado, (pese a que el oro negro evoluciona en valor constantemente).

 

Pues bien, qué tal si esos 7,2 millones de Venezolanos (entre los que hay 2,3 millones de zulianos, también 1,2 de aragüeños, así como 500 mil guariqueños o 270 mil varguense), se ponen los pantalones y deciden darle un futuro distinto a sus nietos, diferente al que le dieron a sus hijos o del que tuvieron ellos.

 

Es necesario que el país cambie, pero para eso no requerimos de partidos políticos o de crisis económica, ni de leyes habilitantes, ministerios, misiones o cambios totales en el sistema constitucional.

 

Para que el país cambie es necesario que los venezolanos decidamos exigir lo que por derecho nos corresponde, promesa con la cual se han venido burlado del pueblo, en nuestras propias caras, desde hace más de una década. El cambio es un cambio ciudadano, cívico, más democrático que unas elecciones, más político que un voto, más legítimo que cualquier otro derecho.

 

(Visited 2.460 times, 1 visits today)

Guayoyo en Letras